A minutos de ser trasladado al hospital de Shriners, en Texas, en Estados Unidos, el niño que sobrevivió a la explosión de cohetería en Santa Ana tuvo que ser trasladado de nuevo al Hospital Benjamín Bloom de San Salvador, debido a un problema técnico con el equipo médico.
«El niño se encuentra estable no ha presentado ninguna complicación al momento, el problema fue el equipo técnico del tubo que lleva la ventilación se le había destrabado al niño y era demasiado riesgo hacer ese cambio en el aeropuerto porque poníamos la vida del niño en peligro. Es por eso que se tomó la decisión de venir hacer ese cambio al Hospital Bloom», dijo el vocero de Shriners El Salvador, quien también agregó que el vuelo hacia el hospital Shriners fue reprogramado para mañana lunes.
Previa a su partida, el ministro de Salud, Francisco Alabí, se había hecho presente para brindar la atención adecuada respecto al trato del menor durante el viaje que realizaría en un avión, el cual había sido gestionado por el Despacho de la Primera Dama, Gabriela de Bukele.
El día de ayer, 5 de diciembre, la Policía Nacional Civil (PNC) reportó una explosión en una cohetería clandestina ubicada en el cantón El Ranchador, la cual había dejado como resultado cuatro niños y cuatro adultos lesionados de gravedad. Horas después, el presidente de El Salvador, Nayib Bukele, señaló que el número de menores lesionados era de tres.
De inmediato los niños con quemaduras graves fueron llevados al Hospital Nacional San Juan de Dios, en Santa Ana, posteriormente, fueron trasladados al Hospital Bloom. Horas después, dos de los tres niños víctimas de la explosión fallecieron debido a la gravedad de sus lesiones, según confirmó, el presidente Nayib Bukele.