El 95.6 % de los ciudadanos salvadoreños considera, según los datos de la última encuesta de opinión de la Universidad Francisco Gavidia (UFG), que lo mejor que ha hecho el presidente Nayib Bukele es transformar la seguridad pública que fue heredada por los gobiernos de ARENA y FMLN, que en el pasado negociaron con las pandillas ofreciéndoles beneficios económicos y carcelarios a cambio de obtener respaldo electoral.
Para el 3.8 % la seguridad no ha sido el área social mejor abordada por el Gobierno y el 0.6 % restante no contestó o dijo que no sabía del tema, de acuerdo con las cifras que proyectó el sondeo de opinión.
El presidente Nayib Bukele combate a las pandillas desde que tomó posesión del cargo, en junio de 2019. En ese mes, el gobernante anunció e implementó a escala nacional el Plan Control Territorial (PCT), que consta de siete fases, de las cuales ya se ejecuta la fase V, conocida como Extracción, que consiste en la instalación de cercos militares y policiales en zonas específicas de un territorio para acorralar y luego capturar a los delincuentes.
El primer cerco fue instalado en Soyapango, en diciembre del año pasado, y permitió la recuperación del territorio asediado por los pandilleros. Después la medida se implementó en las comunidades Tutunichapa 1 y La Granjita, del municipio de San Salvador, y en mayo pasado en Nueva Concepción, Chalatenango, luego que pandilleros mataran a un agente policial.
Nayib Bukele complementó las acciones de seguridad con la implementación del régimen de excepción, vigente desde el 27 de marzo de 2022. La medida, que tiene su base legal en la Constitución de la República, ha permitido la captura de más de 72,000 pandilleros, según la cifra que proporcionó la semana pasada el ministro de Justicia y Seguridad, Gustavo Villatoro.
La oposición política en la Asamblea Legislativa (ARENA, FMLN, VAMOS y Nuestro Tiempo) no respalda el PCT ni el régimen de excepción, porque argumenta que no hay transparencia en el uso de los fondos públicos y porque hay presunta vulneración de los derechos humanos de los capturados.
GUERRA CONTRA LA CORRUPCIÓN
Además de combatir a las pandillas, el presidente Nayib Bukele anunció e inició el 1.° de julio pasado la guerra contra la corrupción. La primera acción desarrollada en ese sentido fue la incautación de los bienes muebles e inmuebles del expresidente de la república Alfredo Félix Cristiani Burkard, quien gobernó el país de 1989 a 1994, con la bandera del partido ARENA.
La encuesta de la UFG indica que el 83.6 % (ocho de cada 10 ciudadanos) dijo que le gusta la lucha contra la corrupción emprendida por el presidente Nayib Bukele. Como parte del combate contra ese flagelo social ya fue capturado Alejandro Muyshondt, quien en su calidad de asesor de seguridad del Gobierno Central filtró información confidencial a periodistas, a un gobierno extranjero y al expresidente de la república del FMLN y prófugo de la justicia, Mauricio Funes.
También ya fue desaforado y capturado por la Policía Nacional Civil (PNC) el exdiputado de Nuevas Ideas, Érick García, acusado del delito de falsedad ideológica, mientras que el legislador de ARENA, Alberto Romero, enfrenta en la actualidad un proceso de antejuicio que puede culminar también en desafuero.
Según la UFG, el 83.2 % de los ciudadanos dijo que el presidente Bukele se preocupa por el pueblo y el 79.3 % planteó que busca el bien para todos.