La Asociación Bancaria Salvadoreña (Abansa), informó este martes que la digitalización de los servicios financieros cobró impulso ante la necesidad de evitar la movilidad de las personas, para prevenir el contagio de COVID-19.
La gremial asegura que, debido a la pandemia, el sector ha trabajado intensamente para acercar aún más, los servicios bancarios a los clientes.
El esfuerzo, según Abansa, se refleja en el aumento de las transacciones por medio de canales digitales.
Así, las transferencias entre bancos -miembros de Abansa- por medio del sistema UNI (ACH) aumentaron 245.1 % anual a diciembre de 2020, también incrementaron a 6,000 las transferencias por banca electrónica en 42.9 %; estas últimas, para todo el sistema financiero, crecieron 55%. En cambio, los medios de pago que requieren traslado físico disminuyeron -transferencias por kioskos o ventanillas y cheques, entre otros
La banca comercial indicó que de acuerdo con datos proporcionados por el Banco Central de Reserva (BCR), en los instrumentos de pagos a minoristas, las cuentas de depósitos siguen un patrón de crecimiento, que de forma interanual muestran un crecimiento de 59,587 nuevas cuentas, lo cual se impulsó por aquellas que corresponden al segmento de ahorro simplificado.
«Lo anterior ha sido impulsado por las cuentas de ahorro simplificadas, alcanzando $1.7 millones, con un incremento del 420 % en comparación a diciembre del 2019», dijo la gremial.
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Abansa aseguró que la confianza de los clientes en la solidez y solvencia de la banca, aun durante la pandemia, respalda en la tendencia de crecimiento del saldo de depósitos, el cual, a diciembre de 2020, alcanzó $15,250 millones, logrando una tasa de crecimiento interanual del 11.5 %.
Añadió que, desde la última crisis del 2009, la banca ha mostrado ser un eje de apoyo durante la pandemia, en relación con el Producto Interno Bruto (PIB), los depósitos alcanzaron 60.4 %, mostrando la profundidad de la banca en el sistema económico salvadoreño.
Por otra parte, los préstamos brutos siguen creciendo, alcanzando un saldo de $13,308 millones a diciembre del 2020, con un alza interanual del 1.1 %. El crecimiento de créditos a empresas, especialmente al Mipyme, en donde el segmento a media empresa para bancos miembros de Abansa creció en 14.8 % a diciembre del 2020, totalizando más de $13,290 millones.
El sector bancario dijo que el crédito a empresas representó 47 % del saldo total, alcanzando $6,276 millones, siendo el segmento con mayor repunte comparado con 2019, esto ha apoyado a la reactivación económica.
Además, explica que los créditos productivos a empresas continuaron siendo el segmento con mayor crecimiento (3 %), en comparación a personas y vivienda, el cual decreció en 0.5 % y 1.3 %. «Esto estaría correlacionado con un efecto de la disminución de la actividad económica propiciada por la pandemia a diciembre de 2020. Al comparar con la última crisis mundial, la banca mostró ser mucho más resiliente, especialmente en el segmento productivo».
Por lo tanto, el sector considera que la banca salvadoreña continuó sólida y estable, exhibe indicadores financieros robustos, como el coeficiente de liquidez en un 39.4 %.