San Miguel volvió con victoria en el reinicio de la Liga Nacional de Fútbol (LNF), Copa Lotería 2023-2024, pero mostró un ritmo parsimonioso y fallón ante un representativo de La Paz voluntarioso, pero sin armas para competir. Los garroberos ganaron 3-0, pero pudieron ser 8-0 sin sonar a escándalo.
Desde el pitazo inicial la parcela Norte del césped del Juan Francisco Barraza fue im necesaria, y en el complemento sobró la Sur. San Miguel fue amo y señor de las acciones, monopolizó el balón y gobernó a placer, pero tardó en demasía en cobrar impuesto a su dominio imperial.
El cuadro anaranjado le sacó los colores y el folclore al técnico Santos Noel Rivera ya que pese al despliegue táctico y gobermabilidad sobre el pasto les faltó pólvora y puntería para llegar a la pausa con un oasis de ventaja.
Los garroberos tuvieron una y mil opciones para festejar gol, pero las más claras se desperdiciaron en los botines y testa de Érick Orellana y José Ventura. «El Rojo» Orellana que a vuelto a hacer dupla en ataque con Andrés Vallecilla, como lo hicieron en Atlético La Unión, remató desviado un gol cantado en el 34′
Pero más imperdonables fueron las ocasiones fallidas de Ventura que en 60 segundos perdonó dos claras. En la primera sacó un derechazo que le fue desviado al corner y de ese saque de esquina le quedó servido el balón para que definiera de cabeza, pero remató fuera.
Entre fallo y fallo, y frente a un rival voluntarioso parecía que la primera mitad acabaría en blanco, pero Vallecilla aprovechó un centro desde la izquierda para vencer al meta Edwin Márquez en el 39′.
El complemento fue un calco del primer acto. El meta Martín Mejía jugó fuera de su área y Julio Galindo que era el centinela de los garroberos en la zaga se movió en la línea del Ecuador de la cancha.
De ahí que con el rival educado a su medida lo único que quedaba por contabilizar era cuantos aciertos y fallos tendrían los garroberos frente al marco, y obviamente dominaron las estadísticas negativas.
Érick Orellana hizo el 2-0 en el 51′, pero luego se peleó con la pelota: se estrelló con el portero rival un par de veces y también con el travesaño. Al final, 85′, Julio Galindo, de penalti, hizo el 3-0.