Otra cita histórica para la Selecta, que tuvo el mismo final: derrota 0-3 contra Argentina, en partido amistoso que se disputó en el estadio Lincoln Financial Field, que no se mostró abarrotado, pero si con un buen marco de aficionados.
Un resultado que no genera ninguna sorpresa y ver como una costumbre que la Selección no gana, al llegar a 21 partidos sin victoria.
El aficionado salvadoreño solo podrá conformar, con los primeros cinco minutos de valentía, saliendo a buscar a los argentinos, con las dos o tres jugadas con las que se acercaron a la meta del Dibu Martínez, aunque una de ellas hizo suspirar con el tiro de Jairo Henríquez, que pasó cerca de la meta rival.
Previo al partido, David Dóniga mencionó que el equipo que arranco en este partido seria la base de la eliminatoria. Cinco de estos repetían del partido contra Bonaire, del miércoles. Mientras que Bonilla y Cerén también repetían del partido que jugaron estos dos en el 2015.
El encuentro fue un monólogo de la Selección argentina creando peligro en cada llegada que realizó, después de que recuperaba la pelota en la mediacancha, donde los de la Selecta hacían una de más o daban un mal pase.
El primer gol de los albicelestes llegó a los 15 minutos, tras un tiro de esquina que conectó de cabeza Cristian Romero. El segundo fue en una jugada de contragolpe, donde termino definiendo Enzo Fernández (41’).
En el segundo tiempo, Argentina subió las revoluciones al duelo, haciendo una presión alta, que complicó más la salida de los salvadoreños, que se defendía con mucho desorden y con Mario González convirtiéndose en figura.
Tapó casi de todo, menos el disparo de Giovanni Lo Celso, quien definió de izquierda, tras una pared con Lautaro Martínez (52’).
Aplausos al final para los argentinos, a quienes siguieron para llevarse un recuerdo. El martes se cierra la gira en EE.UU. ante Honduras.