El Juzgado Especializado de Instrucción C de San Salvador, ordenó que 35 pandilleros detenidos el pasado 24 de marzo en la comunidad Peralta y Barrio Modelo, de la capital, sigan en prisión.
En la audiencia de imposición de medidas, la Fiscalía General de la República los acusó por los delitos de extorsión agravada, agrupaciones ilícitas, privación de libertad, proposición y conspiración para el delito de homicidio agravado y tráfico ilícito de droga.
Los imputados fueron capturados tras una investigación que diversas unidades de la Fiscalía General de la República realizaron durante siete meses, agentes policiales mediante diversas técnicas lograron identificarlos como los responsables de hechos delictivos que estaban ocurriendo en dichas zonas.
Los pandilleros tenían amenazadas a las personas de esos sectores, exigían pago de extorsión y quienes se negaba a entregarles el dinero eran advertidos de atentados en su contra y sus parientes, así como sus negocios.
Las extorsiones las cobraban a la semana y al mes, dependiendo el tipo de negocio así era la cantidad que los mareros exigían a sus víctimas, varias denunciaron los hechos y el ministerio público les otorgó régimen de protección y una clave para que colaboraran en las pesquisas.
Al proceso penal la Fiscalía incorporó testimonios y denuncias de las víctimas, actas sobre casos de entregas controladas y declaración de agentes de la Policía que hicieron las diversas diligencias de investigación.
Los hechos fueron cometidos entre enero a diciembre del año 2020, periodo que fueron investigados por la fiscalía a través de escuchas telefónicas y otras herramientas legales.