Una controversia por la administración de un proyecto de agua potable ha surgido entre la representación de un comité de mujeres y los miembros de la Asociación de Desarrollo Comunal (Adesco) del cantón San Felipe, en Pasaquina, La Unión.
El problema inició hace más de cinco años, cuando durante sus administraciones los exalcaldes Carlos Ramírez y Marvin Nativi juramentaron a los miembros de la Adesco, que según los pobladores, no fueron elegidos en asamblea con la presencia de la mayoría de habitantes.
Debido a esa supuesta imposición de los integrantes de la asociación, la comunidad ha estado en controversia, pues no está de acuerdo en que se encarguen de administrar el proyecto que abastece de agua al cantón.
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«A raíz de estos problemas, la comunidad no permitió que la Adesco administrara el proyecto y por eso el alcalde de aquel momento mandó a cortar el agua y allí quedó abandonado. Hace como siete meses, se organizó un comité de mujeres de la comunidad y reactivaron el proyecto, pero ahora la Adesco se quiere volver a apropiar, pero nosotros no estamos de acuerdo, porque les tenemos desconfianza», expresó Élmer Pineda, habitante de la comunidad.
Los pobladores señalan que el proyecto de agua debe ser administrado por personas que sean elegidas por la mayoría de los pobladores del cantón, y aseguran que el comité de mujeres es el único que cuenta con ese respaldo.
En vista de ese impase, el alcaldeAparicio Villatoro se reunió con las partes involucradas en el conflicto para buscar una solución al problema, para que la comunidad no resulte afectada con el servicio de agua potable y que sea administrado de manera eficiente.
«Se ha acordado que como comité de mujeres vamos a seguir administrando el proyecto de agua durante los 15 meses que le quedan a la Adesco actual, y después se elegirá otra», informó María Lilian Flores.