En San Salvador, diversos juzgados de paz instalados en el Centro Judicial Isidro Menéndez, comenzaron a procesar a conductores peligrosos detenidos por la Policía Nacional Civil (PNC) durante Semana Santa.
El pasado martes en horas de la tarde, la Fiscalía General de la República remitió a 12 imputados y la mañana del jueves continuaron acusando a otra considerable cantidad de arrestados.
La mayoría de conductores peligrosos llevados a los juzgados el miércoles enfrentaron la audiencia inicial la mañana del jueves y fueron puestos en libertad tras una suspensión condicional del procedimiento avalada por los juzgados.
Por el delito de conducción peligrosa de vehículo automotor admitido, los imputados estarán sometidos a reglas de conducta. Tienen prohibido consumir bebidas embriagantes ni drogas, no cambiar de domicilio, prohibición de conducir bajo efectos del alcohol, no frecuentar lugares a donde puedan consumirlas y deben asistir a programas y terapias.
En la temporada de vacaciones 153 conductores fueron detenidos por manejar en estado de ebriedad. Los capturados en San Salvador serán acusados por grupos en los juzgados de paz, los del interior del país serán acusados en la jurisdicción donde los aprehendieron.