«Me siento muy feliz, hubo momentos en que perdimos la fe de llegar a tener nuestra vivienda», inició su discurso Sara Rivas, de 41 años y madre soltera de tres hijos, quien ayer recibió su vivienda propia en la comunidad Paso Puente, por parte del Ministerio de Vivienda.
La beneficiada afirma que por 19 años tuvo que vivir en una pequeña «champa» donde la lluvia, el frío y calor afectaban constantemente su salud física y mental.
«Por 19 años estuvimos todos en champa, aquí vivimos huracanes, techos levantados, frío, humedad, enfermedades, ahora me siento agradecida con la ministra, Michelle Sol y nuestro presidente, (Nayib Bukele), porque nos dieron una oportunidad de vivir de forma digna», afirmó.
Rivas manifestó, además, que por años los gobiernos anteriores y otras instituciones involucradas prometían una solución a sus problemas de vivienda, agua potable, disposición de aguas residuales y calles, pero que la ayuda nunca llegó. «Antes venían de diferentes lugares a decirnos que iban a construir, pero era una mentira solo jugaban con nuestras necesidades. Gracias a Dios ahora sí se nos escuchó», afirmó.
En este contexto, afirma que con las nuevas autoridades el proceso para que se le construyera una casa nueva duró menos de dos años. «Cuando vi mi nombre entre las personas beneficiadas mis niñas y yo nos alegramos mucho», dijo al respecto.
Sara Rivas y sus hijas, así como 84 familias más, recibieron viviendas nuevas por parte del Ministerio de Vivienda en contrapartida con la Organización No Gubernamental (ONG) Centro de Intercambio y Solidaridad (CIS) cuya inversión superó los $600,000.