El Consejo Nacional para la Inclusión de las Personas con Discapacidad (CONAIPD), Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA) y la Embajada del Reino Unido en El Salvador entregaron las Guías de Educación sexual, reproductiva y prevención de la violencia sexual para personas con discapacidad intelectual.
Las Guías fueron elaborados con el Fondo de la Población de las Naciones Unidad (UNFPA) y la embajada del Reino Unido en El Salvador.
«¿Qué es lo que hemos hecho? Trabajar estos materiales con el CONAIPD, con instituciones del Gobierno que dan estos servicios y que tienen el conocimiento técnico, y también con organizaciones de personas con discapacidad, con madres y padres porque tienen también el conocimiento de estar trabajando y de estar continuamente apoyando a las personas con discapacidad», dijo la representante de UNFPA El Salvador, Neus Bernabeu.
Este material permite orientar un lenguaje práctico y sencillo para los padres, madres, familiares y cuidadores, como también profesionales que atienden a personas con discapacidad en diversos temas.
Por su parte, el embajador del Reino Unido en El Salvador, David Lelliott, reiteró el compromiso con la salud y la inclusión de las personas con discapacidad. Manifestó un rotundo apoyo al Gobierno salvadoreño para continuar generando oportunidades en diferentes aspectos.
«Es un tema muy importante para nosotros. Como embajada británica estamos muy comprometidos a todo lo que tiene que ver con la salud y los derechos sexuales y reproductivos. Estamos muy comprometidos que estos derechos son de todos, por eso estamos muy felices con nuestros socios en el Gobierno y UNFPA iban a hacer este trabajo», indicó el diplomático.
Estas Guías de Educación sexual son aplicables para tratar cambios en la adolescencia, autocuido de adolescentes, como también el rol de cada persona para construir y desarrollarse en un contexto saludable, que les proteja ante cualquier tipo de abuso.
«Desde el inicio es una incertidumbre cómo criar a un niño con síndrome de down. A medida que uno va creciendo va escuchando expectativas de padres, pero en realidad no conocemos el desarrollo a futuro de ellos [niños]. Cada historia es diferente, y todo ayuda, en nuestro caso, con un niño con síndrome de down», dijo Kathya de Ordóñez, la mamá de un niño beneficiado.