América Latina puede desarrollar una democracia más rica que la europea o estadounidense si «rehace» la Carta Democrática Interamericana, afirmó este miércoles el presidente de Colombia, Gustavo Petro, en la OEA, donde abogó por el reingreso de Venezuela y la apertura de «conversaciones con Cuba».
«Invito a la reflexión, no invito a que nos confrontemos aquí, sino más bien a que nos reencontremos aquí en el camino democrático», porque «la crítica no es hacia un lado sin mirar el otro lado, polarizándonos», dijo el presidente colombiano, rompiendo una lanza a favor de Venezuela y Cuba.
«Claro que sí me interesa y lo estoy luchando que Venezuela reingrese al sistema interamericano de derechos humanos, claro que deberíamos conversarlo con Cuba», afirmó el presidente colombiano durante la sesión protocolar del Consejo Permanente, órgano ejecutivo de la OEA, en Washington.
El sistema interamericano de derechos humanos está compuesto por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos y la Corte Interamericana de Derechos Humanos (Corte IDH), dos órganos de la Organización de los Estados Americanos (OEA), de la que el gobierno venezolano de Nicolás Maduro se salió en 2019 tras haberlo pedido dos años antes por discrepancias.
En 2019 la OEA «no reconoció la legitimidad» de la reelección de Maduro, al igual que Estados Unidos y medio centenar de países. En la organización sesionó un representante del líder opositor Juan Guaidó hasta que la propia oposición venezolana puso fin en enero de 2023 al gobierno provisional que presidía y actualmente Venezuela no tiene representantes.
Cuba, por su parte, no participa en la OEA desde su exclusión en 1962, a pesar de que en 2009 la organización decidió dejar sin efecto esa decisión.