Émerson Mauricio tuvo que ir a la caja pequeña para cobrar un penalti cerca del final del juego ante Dragón. Lo convirtió y se fundió en celebración con sus compañeros
El camisa 30 de Alianza hizo la señal de que se había sacudido la mala vibra y había podido poner el 0-3 definitivo ante Dragón.
Tras el final del choque ante los escupefuego, «Diario El Salvador» consultó a Mauricio sobre ese tercer tanto y sobre la señal para sacudirse las malas vibras.
«Me sacudí las malas vibras y fue todo. No creo que este sea un mal momento que yo esté pasando, en el torneo anterior terminé marcando goles, pero me sentía en este torneo con un poco de malas vibras. Gracias a Dios, hoy me las pude sacar. Esta es la confianza que necesitaba y ahora queda aprovechar los minutos que se me den para aportar al equipo», dijo Mauricio a este medio.
Dese el año pasado, Mauricio fue promovido al primer equipo de Alianza, tras haberse formado en los niveles juveniles del representantivo capitalino.