La Unidad Comunitaria de Salud Familiar (UCSF) de Santa María, Usulután, cuenta actualmente con 16 usuarias lactantes que donan al banco de leche materna para alimentar a los bebés que lo requieren en el Hospital Nacional San Juan de Dios, en San Miguel.
Esta unidad de salud funciona como centro de recolección en el que se encargan de extraer la leche materna, ponerla en refrigeración para que no se dañe, y luego la almacenan en el hospital migueleño.
«El Ministerio de Salud y el Gobierno están implementando un programa que busca que las madres y los niños tengan una buena salud y, así, evitar la mortalidad infantil y materna con el uso de la leche materna», manifestó Betty Hernández, directora de la unidad.
Para ayudar con el proyecto, a las madres lactantes se les pide como requisito que tengan buenos hábitos higiénicos, se alimente con una dieta balanceada y tenga suficiente leche para amamantar a su bebé y que pueda hasta donar para niños necesitados.
«Algunas veces las madres que están lactando tienen demasiada leche y se desperdicia, por lo que es mejor hacer una labor humanitaria, y por eso las invitamos a donar», manifestó Hernández.
La directora de la unidad hace el llamado a otras madres a participar en el proyecto, con el objetivo de beneficiar a bebés del hospital de San Miguel, que han quedado huérfanos o que sus madres no pueden amamantarlos por algún problema de salud.