Medios estadounidenses informaron ayer que Robert Card, el principal sospechoso de los tiroteos en la ciudad estadounidense de Lewiston (Maine), fue encontrado muerto.
La Policía estadounidense había intensificado la búsqueda de Card, señalado de la muerte de 18 personas. El militar reservista del Ejército, de 40 años, era uno de los mejores tiradores de su unidad, de acuerdo con un boletín de la Policía estatal comprobado por la cadena CBS.
El documento detalla que Card comenzó a hacer declaraciones sobre que «oía voces» y quería lastimar a sus compañeros mientras se desempeñaba en el centro de entrenamiento de Camp Smith, en Nueva York. Por esta razón, su superior lo remitió a un hospital militar, donde pasó varias semanas en evaluación.
Agentes de la Policía y de la Oficina Federal de Investigación (FBI, en inglés) fueron desplegados ayer en varios sitios, incluida la orilla de un río donde se encontró el automóvil del sospechoso. «Por favor, salga», repitieron los policías a lo largo de la noche del jueves por megáfonos, «nos gustaría hablar con usted».
Drones, helicópteros y vehículos blindados también rodearon la zona. Lewiston se transformó en una ciudad fantasma luego de que sus 36,000 habitantes recibieron la orden de las autoridades de confinarse en sus casas.