La justicia belga inició este martes el proceso contra 14 personas acusadas de complicidad con los yihadistas que en 2015 perpetraron ataques en París con un saldo de más de un centenar de muertos.
Los procedimientos se abrieron bajo estrictas medidas de seguridad en el tribunal instalado en una antigua sede de la OTAN, y se espera que duren hasta el 20 de mayo, aunque es probable que el veredicto demore varias semanas más.
Estas audiencias se llevan a cabo en paralelo con un juicio en París contra 20 sospechosos acusados en Francia, que arrancó en septiembre pasado y se espera que dure hasta finales de junio próximo.
El grupo radical Estado Islámico había asumido la responsabilidad por los ataques en París y Saint Denis.
Los yihadistas activaron cinturones suicidas fuera del estadio Stade de France, al tiempo que un grupo de hombres armados en un automóvil disparó indiscriminadamente contra persona que se encontraban en restaurantes y bares.
Seguidamente tres yihadistas mataron a 90 personas que presenciaban un espectáculo musical en un local tradicional de París, Le Bataclan.
De acuerdo con los fiscales del caso, parte del ataque fue planeado en Bélgica.
Los 14 acusados en el proceso belga (13 hombres y una mujer) son sospechosos de transportar, alojar o ayudar financieramente a algunos de los responsables por los ataques.
Los cargos incluyen conducir a uno de los presunto atacantes al aeropuerto para un viaje a Siria.
Dos de los 14 sospechosos acusados son juzgados en rebeldía, ya que cree que ambos, de nacionalidad belga, murieron en Siria.