«Es probable que la tercera dosis para todos comience (a aplicarse) a partir de enero», anunció.
Actualmente, esa aplicación de refuerzo está reservada a los pacientes con enfermedades graves, a los mayores de 60 años y al personal de sanidad.
Italia ha registrado casi 132.000 muertes por covid-19 desde febrero de 2020.
Hasta la fecha, se han vacunado casi 44,5 millones de personas, es decir, 82,3% de la población mayor de 12 años, y 1,1 millones de personas han recibido una tercera dosis.
Para limitar los contagios e incitar a los italianos a vacunarse, el gobierno dirigido por Mario Draghi ha instaurado un pase sanitario obligatorio para todos los trabajadores.
El pase sanitario se entrega a las personas vacunadas o sanadas recientemente de covid-19, pero también previa presentación de una prueba negativa cuyo coste corre a cargo de los trabajadores.