Médicos del Hospital Nacional de Niños Benjamín Bloom beneficiaron a un paciente de nueve años con un trasplante de riñón usando videolaparoscopía, luego que el órgano fuese donando por su madre.
Esta cirugía de alta complejidad fue posible debido al equipamiento que el hospital, al igual que otros, han recibido por parte del Gobierno de El Salvador, a través del Ministerio de Salud.
«Durante estos años, hemos equipado nuestros quirófanos con torres de videolaparoscopía; una herramienta que nos permite realizar cirugías poco invasivas y que agiliza el proceso de recuperación de los pacientes. En este caso, la usamos para realizar un trasplante renal de madre a hijo, un procedimiento complejo en el que hay que diferenciar arterias, vasos y otras estructuras internas. Nos alegra que cada vez sean más los equipos que se capacitan en el uso de estas herramientas», detalló el Minsal.
De acuerdo con datos de la institución, este fue el trasplante renal 51 que se ejecutó con el hospital Bloom.
Por otra parte, en el Hospital Nacional San Rafel, en un trabajo articulado con la fundación estadounidense Operation Walk, se desarrolló una jornada de cirugías ortopédicas para beneficiar a la población salvadoreña.
«Esta jornada beneficiará a salvadoreños que padecen artrosis de rodilla y cadera, una enfermedad degenerativa que disminuye la protección de los huesos. Las cirugías consisten en la colocación de prótesis, que ayudarán a que los pacientes puedan volver a actividades cotidianas y reducirán el dolor», indicó el Minsal.
Como parte del equipo médico que participan en las cirugías están: ortopedas, traumatólogos, anestesistas, enfermeros, trabajadoras sociales y fisioterapeutas.