El ministro de Defensa Francis Merino Monroy aseguró este martes que el principal objetivo de la estrategia de seguridad pública que implementan como autoridad es que las pandillas en El Salvador desaparezcan, no obstante, aclaró que es un problema lleva más de 30 años en el país.
«El objetivo de las autoridades es que las pandillas desaparezcan, pero, no se puede resolver en dos años un problema que lleva más de 30 años», advirtió el funcionario durante la entrevista Diálogo de canal 21.
En los dos gobiernos del FMLN las pandillas tuvieron mayor incidencia de delitos en el país, con el objetivo que las cifras de los homicidios se redujeran el gobierno del expresidente Mauricio Funes avaló la denominada «tregua entre pandillas», según se ha señalado en investigaciones fiscales por las cuales hasta el momento tiene procesados judicialmente a exfuncionarios de esa gestión, como el exministro de Defensa David Munguía Payés.
Actualmente los resultados de las acciones implementadas por el Plan Control Territorial (PCT) han logrado lo que los gobiernos del partido ARENA y del FMLN no pudieron en más de tres décadas, esto es lo que destacan las actuales autoridades de Seguridad Pública.
De ahí que a criterio del ministro Merino Monroy, la presencia de pandillas no es algo que se pueda resolver en corto tiempo, sin embargo, expresó que «la presencia de la autoridad ha provocado una reducción de su actividad». «El problema de las pandillas no ha terminado, pero ahora se respira un ambiente diferente en el tema de la seguridad», destacó.
Respecto a las extorsiones, el funcionario pidió a la población denunciar ante la Policía Nacional Civil (PCN) y la Fiscalía General de la República (FGR) este tipo de hechos.
«Con respecto a las extorsiones se necesita que la población realice sus denuncias para que las autoridades hagan su trabajo, no hay que tener temor de denunciar», recomendó.