Dos peleas durante una fiesta callejera en la ciudad Syracuse, en Nueva York, Estados Unidos, causaron graves lesiones y heridas en 13 víctimas el domingo en la madrugada. La policía local informó que espera que los jóvenes, de entre 17 a 25 años, sobrevivan.
El caos provocó que los «cientos» de jóvenes congregados huyeran de inmediato. Cuatro reportaron heridas con arma de fuego, cinco fueron apuñaladas en hombros, piernas y brazos; y otras cuatro personas fueron arrolladas por los automotores. Entre las víctimas se encuentran tres hombres y 10 mujeres.
A la fiesta, convocada en redes sociales, asistieron estudiantes y graduados de secundaria, y universitarios que retornaron a sus viviendas debido a las vacaciones de verano, según los oficiales.
Testigos compartieron a la policía que las riñas sucedieron antes de la medianoche con 20 minutos de diferencia; sin embargo, en la última se desató el tiroteo sobre la calle Davis, la calle Massena y la avenida Merriman. El sistema de detección de disparos de la ciudad reportó que se dispararon docenas de balas, declaró el jefe de policía de Syracuse, Joseph Cecile, al medio local Syracuse.com. Además, oficiales que patrullaban a unas calles del enfrentamiento escucharon los disparos.
El festejo se llevó a cabo sin ningún permiso autorizado por las autoridades, las calles no estaban bloqueadas y no había ningún agente, aseguró Cecile.
El teniente de la policía de Syracuse, Matthew Malinowski, comunicó que la investigación continúa su curso. El domingo por la mañana se evidenció sangre en la acera y las calles tras la tragedia.