Hace seis meses se vivía una tragedia en el estadio Cuscatlán en la que nueve aficionados de Alianza perdieron la vida. Se cerraron las puertas del Monumental por ese suceso, pero anoche se volvieron a abrir para que se jugara el clásico nacional, duelo pendiente de la fecha 21 del Apertura 2023.
Tomadas acciones de seguridad en conjunto con la PNC y Protección Civil, Águila y FAS se pararon en la cancha del Monumental, que también estuvo en mantenimiento, para pelearse el primer lugar de la clasificación.
Los emplumados, líderes desde hace rato, llegaron con la firme convicción de sumar para asegurar el primer lugar y llegar con más ventaja sobre el resto a los cuartos de final.
Así lo demostró en cancha, fue el que tomó la iniciativa y trató de atacar siempre la portería de Kevin Carabantes. Pero el primer tiempo estuvo lejos de ser un partido digno de un clásico y se conformaron con un 0-0 antes de ir al descanso.
El juego, además, se enfrió tras la atención que recibió Carabantes en la cancha por un corte en el rostro. A la parte de complemento Águila llegó con las revoluciones a tope, con la misión de vencer a su archirrival. Así halló un penalti que hizo efectivo Carlos Salazar, para llegar a 15 dianas en el certamen.
Al estar abajo en el marcador FAS estrelló una pelota en el poste de la cabaña migueleña, pero estuvo más cerca de aumentar la cuenta el cuadro oriental. Sin embargo, en el 90+4’, Jairo Martínez apareció para rescatar un empate de 1-1.