El Juzgado Primero de Sentencia de San Miguel condenó a 20 años de prisión a Wílber Francisco Chicas por el delito de homicidio y a sus padres por complicidad en el delito.
Según la Fiscalía General de la República (FGR), el imputado es integrante de la MS-13 y cometió el delito en su casa, ya que consideró que la víctima era informante de las autoridades.
Su padre, Jorge Alberto Vela Ibarra, y su madre, Xiomara de Vela, recibieron una pena de 15 años cada uno.
«A Vela y a su esposa se les acusó de haber colaborado en el asesinato; se les procesó por el delito de complicidad necesaria en el homicidio», declaró la Fiscalía.
La víctima fue identificada como Pedro Antonio Quintanilla, quien fue asesinado en agosto de 2016 en la colonia La Pradera, de la ciudad de San Miguel, en la casa del pandillero.
En ese lugar, Chicas le recriminó su actuación en la agrupación delictiva y posteriormente lo mató, llevó el cadáver en un taxi hasta un predio baldío, donde lo enterró con la colaboración de los padres.
De acuerdo con la Fiscalía, para lograr una pena condenatoria, contaron con el relato de una persona que presenció el hecho, así como con otros elementos que probaron la culpabilidad de los imputados.