El presidente del Banco Central de Reserva, Douglas Rodríguez, informó ayer que junio de este año ha sido el sexto mes consecutivo en el que se reporta un aumento de las exportaciones. En números netos, en el primer semestre de 2022 son $547 millones más de lo que se exportó respecto al mismo período del año pasado. Además, el BCR destaca que junio es el tercer mes con mayores crecimientos en las exportaciones de 826 productos salvadoreños, que llegan a 113 destinos internacionales.
Esto es un fiel reflejo de la robustez de la economía nacional, que supo recuperarse prontamente del parón debido a la pandemia de la COVID-19 y que, gracias a las medidas sanitarias tomadas por el Gobierno del presidente Nayib Bukele (el efectivo control de la enfermedad, la ampliación y el equipamiento de la red hospitalaria nacional y una extensa y masiva campaña de vacunación), El Salvador fue uno de los países que mejor respondieron a la emergencia mundial del coronavirus y una de las naciones que más pronto pudo reactivarse económicamente debido a que los trabajadores y las empresas estaban plenamente protegidos.
El alza en las exportaciones tiene múltiples explicaciones, que inician, desde luego, con la pronta recuperación de la COVID-19, pero que también incluyen otros factores favorables, como, por ejemplo, la estabilidad en el precio de la energía eléctrica. De hecho, hay una expectativa a la baja, debido a que la generación ha reducido costos, sobre todo por las abundantes lluvias, con lo que la generación hidroeléctrica inyectará bastante electricidad al sistema nacional, además de la puesta en funcionamiento de la planta generadora de gas en Acajutla.
Pero también El Salvador se encuentra en una posición sumamente privilegiada, ya que es el segundo país en la región centroamericana con la inflación más baja. Esto vuelve muy competitivas a las empresas nacionales, pero solo ha sido posible gracias al esfuerzo constante y coordinado de diferentes instituciones de Gobierno. El presidente Bukele lanzó 11 medidas anticrisis, entre las que destaca el subsidio del combustible y la verificación de los precios de alimentos (para evitar la especulación), además de la exoneración del pago de impuestos de una serie de productos alimenticios.
Ahora, de acuerdo con los registros hasta medio año, el país tiene un aumento de 16.8 % de las exportaciones, que llegan a un acumulado de $3,802 millones. Estas, sin duda, son grandes noticias, y son posibles gracias al trabajo coordinado del Gobierno.