La Fiscalía General de la República (FGR) y la Policía Nacional Civil (PNC) procedieron ayer a la destrucción de 500 kilogramos de cocaína valorada en $12.5 millones. La droga fue decomisada la semana pasado en la zona costera del territorio de El Salvador, según señaló la Fiscalía.
La droga fue incautada en el municipio de San Luis La Herradura, en el departamento de La Paz. Fue destruida luego que se desarrollara la audiencia inicial en el Juzgado de Paz de dicho municipio en contra del ciudadano guatemalteco Francisco Martínez, quien fue enviado a prisión mientras dura el proceso judicial en su contra.
La Fiscalía señaló que en el mismo caso estaba involucrado otro ciudadano oriundo de Guatemala e identificado como Fernando Martínez Amaya, quien falleció en un intercambio de disparos contra la policía en el momento en que se les daba persecución en aguas salvadoreñas.
La Unidad Especializada de Delitos de Narcotráfico de San Salvador de la FGR explicó que la droga se destruye lo más inmediatamente posible luego de su incautación y tras realizarse los análisis respectivos. En muchos casos, la droga es destruida al finalizar el proceso judicial y cuando las autoridades deciden que ya no es parte de la situación jurídica del caso.
«La solicitud es que la droga debe destruirse de manera inmediata y eso varios jueces ya lo están entendiendo y accediendo, porque ven que la misma ya no es necesaria para los fines del proceso en donde lo importante es demostrar que la sustancia que se ha decomisado es cocaína y para lo cual acreditamos con un análisis de sustancia controlada que realiza la División Técnica Científica de la PNC», señaló un fiscal de dicha unidad.
