Hace seis años nos tocó tomar decisiones drásticas y duras para el baloncesto femenino de nuestro país. Quedar fuera del medallero de los Juegos Centroamericanos Managua 2017 como consecuencia, entre otras cosas, de un boicot deportivo, nos obligó a replantear la situación que vivíamos. Era el momento de darle vuelta al asunto.
Por eso tomamos la decisión de apostarle a un proceso en donde pudiéramos ir juntando los elementos necesarios para potenciar cualidades y hacer conjunto. Y esto no venía únicamente por el grupo de jugadoras y el cuerpo técnico, sino que porque estábamos conscientes de que, si queríamos llegar a otro nivel, la inyección económica tenía que ser mayor.
Con un Ray Santana recién llegado al país, la apuesta era clara: iniciar un verdadero proceso a mediano y largo plazo con un grupo de jugadoras jóvenes, sin malicia alguna, que nos permitiera llegar a donde hacía mucho tiempo no llegábamos.
En el equipo que se coronó campeón centroamericano al ganar el Cocaba 2023 el pasado domingo 23 de julio cuatro chicas han trabajado con nosotros desde 2017: Gaby Vásquez, Fátima Avilés, Kim Villalobos y Elisa Domínguez. A ellas se le sumaron Silvia Vega, Gaby Alfaro y Kenia Mena, quienes vienen de procesos infanto-juveniles, participando incluso en premundiales continentales. Vale la pena recordar que en los 10 años al frente de la Fesabal hemos conseguido la clasificación en cuatro eventos de este tipo: dos sub-16, uno sub-18 y uno en la categoría mayor. Jugar un premundial continental equivale a decir que hemos estado entre los mejores ocho equipos de América en esas cuatro ocasiones.
En el camino hemos sumado a figuras como Aída Funes, Hillary Martínez, Astrid Heredia y Émely Tévez, así como a Destiny Campbell, quien resultó elegida como la Jugadora Más Valiosa del Cocaba 2023, gracias a sus promedios de 22.2 puntos, 3.8 bloqueos y 2.6 robos en los cinco juegos disputados en este evento regional. Conjuntar a este grupo de chicas no fue fácil y tuvimos que ser creativos a la vez para dar certeza de lo que se planteaba de manera verbal también se cumpliría en la práctica.
Lo de Destiny es una confirmación del discurso que hemos manejado desde que asumimos la presidencia «ad honorem» del Indes: buscar en el extranjero a atletas que quieran representar y defender nuestros colores, mientras descubrimos y trabajamos al talento local para jugar por nuestras selecciones. Hemos aplicado lo permitido por las federaciones internacionales, sin quedarnos atrás de lo que ya muchos países practican.
Según las cuentas de la Federación Salvadoreña de Baloncesto, el último título a nivel centroamericano alcanzado por un equipo femenino fue a inicios de los años ochenta.
De ahí que tuvieran que pasar prácticamente cuatro décadas para volver a subirnos a lo más alto del podio en un torneo del istmo.
Para alcanzar este éxito ha sido fundamental el proceso. Aguantar y soportar por esa apuesta. Esta selección, a pesar de que sus integrantes tienen un promedio de 22 años, ya cuenta con un estilo propio de juego, gracias al gran trabajo realizado por un cuerpo técnico consolidado y que ya acumula mucho tiempo junto. Ese estilo propio de juego incluso es el mismo que se trabaja con las selecciones infanto-juveniles, de ahí que las chicas que suben a la mayor ya saben a lo que van.
Esta columna de opinión se quedaría corta para contarles todas las historias vividas, tanto dentro como fuera de la cancha, algunas amargas y otras alegres, que hemos sufrido y disfrutado para llegar a ganar lo que hacía 40 años no ganábamos: una medalla de oro a escala centroamericana en la rama femenina.
Pero estamos claros de que todo ha valido la pena. El proceso ha valido la pena. Y como vale la pena, continuaremos #ConstruyendoElCamino para el baloncesto salvadoreño. Queremos seguir apoyando individualmente el trabajo de cada una, compartir sus necesidades y, sobre todo, solidificar el grupo, abriendo oportunidades a otras chicas que tengan la misma visión de trabajo compartida hasta el momento y que vengan a sumar componentes que hagan falta a lo largo de este trayecto.