La guerra entre bandas criminales en Haití obligó a más de 2,680 personas a huir de sus comunidades entre el 7 y el 11 de febrero en los municipios Carrefour, Cité Soleil y Tabarre, en Puerto Príncipe, comunicó en un informe la Organización Internacional para las Migraciones (OIM).
El 94 % de las poblaciones desplazadas se refugiaron con familias de acogida y el 6 % en la plaza Clercine, en Tabarre.
El presidente de República Dominicana, Luis Abinader, señaló este martes ante el Consejo de Seguridad de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) que República Dominicana no da a Haití lo que le sobra, sino que aporta lo que le falta.
«El tiempo de las promesas ha terminado, entramos en el momento de las acciones, el dinero aparece ahora o el colapso de Haití será irreversible. Ese colapso sería una amenaza para nosotros y para la región, por eso quiero advertir a la comunidad internacional que República Dominicana seguirá luchando para evitar ser arrastrada al mismo abismo que Haití», explicó el mandatario.
«O luchamos juntos para salvar a Haití o lucharemos solos para proteger a la República Dominicana», afirmó.
«Lamentablemente, la grave situación no ha sido atendida con la urgencia y contundencia que amerita», comentó el presidente ante los medios de comunicación.