Un Tribunal de Sentencia en Materia de Corrupción de Honduras declaró culpables al exdirector de Inversión Estratégica de Honduras (Invest-H), Marco Bográn, por el delito de fraude agravado; y al exadministrador Alex Moraes por el delito de violación de los deberes de los funcionarios en el caso de corrupción por la compra fraudulenta de siete hospitales móviles para atender a los pacientes de la COVID-19 en 2020 por un monto de $47 millones.
Bográn podría enfrentar una pena de 10 a 11 años de prisión más una multa. El exdirectivo continuará en prisión preventiva, mientras que Moraes fue inhabilitado del cargo público de 8 a 10 años y quedó en libertad. El Tribunal resolvió que Moraes solo acató las órdenes de Bográn por «ser su superior inmediato». La audiencia de individualización de pena y sentencia quedó programada para el 31 de mayo.
Ambos funcionarios permanecieron desde abril de 2021 en una cárcel ubicada en Tegucigalpa.
La fiscalía hondureña anunció que apelará la resolución de Moraes.
La lectura del fallo inició a las 10 de la mañana y detalló las carencias de los hospitales móviles, falta de reportes técnicos de los equipos, incumplimiento en el distanciamiento de pacientes en las unidades de cuidados intensivos (uci), y el requerimiento de inversión adicional para que operaran.
Bográn pese a que fue advertido por el personal que se desempeñada en el Departamento de Adquisiciones de Invest-H sobre el proceso de compra y ausencia de documentos, aceleró el contrato con el guatemalteco Axel Gamaliel López, representante legal de HospitalMoviles.com y ELMED Medical Systems INC. La primera cancelación de los $47 millones se llevó a cabo el 19 de marzo de 2020 y la segunda el 2 de abril para la obtención de los hospitales y siete plantas de tratamiento.