Reynaldo Carballo asegura que las elecciones internas del Partido Demócrata Cristiano (PDC) están amparadas en la legalidad, y por ello esperaba que las autoridades del Tribunal Supremo Electoral (TSE) lo ratificaran en el cargo, al igual que a los otros cuatro nuevos dirigentes, como se hizo. El nuevo secretario general del PDC anuncia la ejecución de una auditoría integral para saber cómo se manejaron la deuda política y la ayuda internacional. Carballo resta importancia a las voces disidentes y afirma que están desesperadas por retomar el partido, pues temen a la auditoría, cuyo resultado llevará ante la Fiscalía, de encontrar conductas que linden con actos delictivos. También habla de expulsar a Rodolfo Párker, entre otros dirigentes democristianos.
¿Cuál es la legalidad que ampara las elecciones?
Todo el procedimiento que hemos seguido está con base en nuestros estatutos, que es lo que rige la legalidad de nuestro partido, y la Ley de Partidos Políticos. El secretario general nacional había abandonado el barco y, con base en los estatutos del partido, asumía el secretario nacional adjunto, pero este había renunciado; entonces, le correspondía al secretario jurídico nacional que tenía la legalidad por ausencia de los anteriores secretarios. Es así como se convoca a la Comisión Política. Hay un acta de instalación y luego, teniendo mayoría, se inició la sesión. Vimos varios puntos, como la transparencia de la deuda política, pero en puntos varios el secretario general de Sonsonate, Mairon Tobar, pidió que se convocara a elecciones internas para elegir a los que habían abandonado el barco y renunciado. El punto se llevó a votación y tuvimos mayoría en esa sesión de la Comisión Política.
¿Y luego qué pasó?
Lo que dicen nuestros estatutos: el secretario general nacional en funciones, que en ese caso era el secretario jurídico nacional, porque los demás ya habían abandonado el barco, tenía que notificar a la Comisión Electoral Nacional, que por ley elaboró la convocatoria a elecciones y organizó el proceso en los 14 departamentos. Los tiempos se cumplieron y las elecciones se realizaron. El resultado es el de todos conocido. Nuestras elecciones gozan de legalidad y de legitimidad. Todo lo realizado, incluyendo el resultado de las elecciones, ha sido presentado ante el Tribunal Supremo Electoral (TSE).
¿Qué esperaban del TSE?
Esperábamos una resolución afirmativa, positiva, porque todo está hecho con base en la ley. Que venga a decir la pequeña argolla que tenía secuestrado el partido lo que anda diciendo, pues es lógico porque hoy está desesperada, pues ya no va a tener la vaquita lechera que lactó por tanto tiempo. Nosotros estamos en lo correcto y en lo legal. Hemos hecho todo legal. Más del 95 % de los afiliados votó por la nueva dirigencia y eso demuestra que todo fue con base en la ley. Eso también nos da la legitimidad en los cargos de dirección del partido. Esa pequeña argolla dice tener masas, pero ¿por qué no se presentaron a votar en contra? Porque no tiene nada. Ellos ensuciaron este gran partido. Ya es tiempo de que se vayan. Hoy es el renacer de una nueva democracia cristiana.
¿Cómo ha encontrado el partido?
Lo que me preocupa es que la deuda política está en manos de ellos, y ellos tienen la chequera. ¿Cómo están repartiendo los cheques? No sé, pero sí le garantizo que, cuando seamos notificados por el Tribunal Supremo Electoral (TSE), nombraremos una empresa para auditar este partido por muchos años atrás. Queremos ver dónde está la deuda política que nos pagan, la ayuda internacional. Queremos ver dónde se han gastado estos dineros. Si esa pequeña argollita está necia por querer continuar administrando el partido, la pregunta es por qué insistir, si ellos lo van a enterrar. La respuesta es sencilla: enterrado el partido, nadie nos va a contar las costillas. Va a haber una auditoría integral y ese es el temor. El PDC no tiene bases. Ellos invirtieron dinero, pero ¿a dónde están los resultados? En las elecciones pasadas gastaron dinero en el departamento de San Salvador y en los municipios del Gran San Salvador, y uno se pregunta ahora dónde están los resultados. Este partido sigue con vida política porque Reynaldo Carballo ganó la diputación en el departamento de San Miguel. La organización del partido solo está en papel.
Si la auditoría revela que hay indicios de posibles actos delictivos, ¿usted lo denunciará?
Sí, seguro. Estamos en lo legal y vamos a continuar en lo legal. Este partido tiene que ser transparente, mes con mes, dando información contable a la Comisión Política en pleno. Nosotros vamos a seguir todo lo legal, y ello pasa por acudir a la Fiscalía y a todas las instancias que tengamos que acudir.
¿Tiene sospecha de malversación de recursos en el interior del partido?
Tengo sospechas. Ahí andaban con una fotocopia como de $20,000 de unos restaurantes chabeleados que querían que les pagarán también. Eso será auditado. Ellos tienen que regresar ese dinero. Ojalá no hayan repartido todo el pisto de la deuda política y no lo hayan agarrado como que es piñata. Eso será auditado. Aquí tiene que ser transparente todo. No tienen que venir a agarrar los cheques como que fueran cuentas personales.
¿Cómo era su relación con Rodolfo Párker?
Cuando él llegó a ofrecerme la diputación, yo le puse mis condiciones: total independencia, autonomía en mi departamento para la búsqueda de candidatos a alcaldes y diputados, y si era electo como diputado, también quería autonomía en la Asamblea Legislativa; o sea, Reynaldo Carballo se iba a apegar a dar sus votos con base en su criterio y principios, y no iba a recibir órdenes de nadie, y eso lo he mantenido. De él no sé nada. Dejó el barco tirado, abandonado…
¿Qué pasará con Rodolfo Párker en el interior del partido?
Hay que expulsar a la argolla que tuvo secuestrado este partido por muchos años, los culpables de no haber dejado crecer este bonito partido con credibilidad y principios a escala nacional e internacional. Ellos lo ensuciaron porque lo tuvieron secuestrado solo para fines personales. No es posible, ni tampoco es justo, que sigan ellos manchando el nombre de la democracia cristiana. Tienen que ser expulsados.
Cuando se refiere a ellos, ¿quiénes son ellos?
Están Rodolfo Párker, Ana Guadalupe Martínez, Sebastián Alejo, [Carlos] Herrarte, [Orlando] Mena y [Jorge] Mazariego. Esa argolla y otros más. Esa argollita que mantuvo secuestrado este partido y que ahora usa a abogados para ir a poner recursos al Tribunal [Supremo Electoral] porque está desesperada porque la vaquita lechera que tenía se le está yendo, ya la perdió porque ya reaccionó la militancia democristiana a escala nacional. Ellos están con Reynaldo Carballo y los demás que me acompañan en la Comisión Política. Este es el renacer del partido. Traemos a gente que viene a servir al pueblo y no a servirse del pueblo, como los anteriores dirigentes. No somos una ideología, somos una doctrina que nos rige.
Una vez que asuma la Secretaría General, ¿cómo será la relación con el Gobierno del presidente Bukele?
Yo siempre he sido un hombre de pensamiento constructivo y positivo. He sido fuertemente criticado porque he apoyado al presidente Bukele en algunos proyectos de ley, pero he visto que esos proyectos son para favorecer a las grandes mayorías del pueblo salvadoreño, especialmente a los sectores más desposeídos. También en la legislatura pasada apoyé proyectos de ARENA y proyectos del FMLN que consideraba que eran buenos para el pueblo. Los proyectos de ley para beneficiar a argollitas hasta para evadir impuestos yo nunca los apoyé, como el decreto que permitió evadir más de $280 millones.
¿A trabajar fuerte desde la conducción del partido?
Vamos a trabajar por el pueblo. Hay que buscar perfiles que cumplan con los principios y valores que tiene la democracia cristiana.