Habitantes del municipio de San Juan Nonualco, en La Paz, y feligreses de diferentes parroquias celebraron esta tarde con una misa en el estadio de la localidad la beatificación del sacerdote franciscano Cosme Spessotto.
Previo a la ceremonia, las reliquias del beato recorrieron las calles de la localidad que fue su hasta llegar al estadio donde fueron veneradas por los asistentes en señal de respeto y reconocimiento a su legado.
La procesión fue acompañada de cantos de júbilo por parte de los feligreses en honor al nuevo beato; asimismo, fueron detonados cohetes mientras la urna con las reliquias era transportada hacia el lugar donde se celebró la eucaristía.

Durante la misa, que fue dirigida por monseñor Elías Bolaños, obispo de la diócesis de Zacatecoluca, fue leída la carta enviada por el papa Francisco con la declaratoria de beatificación de Rutilio Grande, Nelson Lemus, Manuel Solórzano y del padre Cosme Spessotto.
«En este lugar, él dejó su vida, consagró su vida al Señor. Esta ciudad, donde él estuvo 27 años le tiene tanto cariño, y con la beatificación se sienten tan agradecidos con Dios que es lo que demostramos con esta procesión y eucaristía de agradecimiento a Dios», indicó el obispo Bolaños a «Diario El Salvador».
El entonces padre Cosme Spessotto fue designado el 30 de abril de 1950 a la parroquia de San Pedro Nonualco, pero el 18 de octubre de 1953 tomó posesión de la parroquia de San Juan Nonualco donde permaneció por 27 años hasta el 14 de junio de 1980 cuando fue martirizado, según datos biográficos del Arzobispado de San Salvador.

«Estamos felices, no esperábamos tanta alegría de los salvadoreños. Recuerdo su sonrisa, él siempre caminaba sonriendo, parecía que andaba cantando», dijo Margarita Spessotto, tía del beato Cosme Spessotto que asistió junto con otros familiares a la eucaristía en San Juan Nonualco.
De igual manera, quienes conocieron a Fray Cosme aseguran que se distinguió por su actividad caritativa y pastoral y las obras que ejecutó en el municipio: inició la construcción de una nueva iglesia, fundó una escuela parroquial, y visitaba todos los cantones de su parroquia.

«Tuve una relación bellísima desde niña hasta adulta. Tuvimos la bendición con mi esposo de que él nos casó. Él se encargó de hablar conmigo para hacerme ver lo que representaba el sacramento del matrimonio. La beatificación del padre Cosme tiene un significado muy grande, porque jamás pensé que después de tenerlo físicamente, ahora lo voy a tener espiritualmente», manifestó Rosa Calderón, conocida del padre Spessotto.
El obispo Bolaños detalló que, al haber sido reconocido como beato, la reliquia del Spessotto (un lienzo de tela con el que fue envuelto el día de su asesinato y que quedó impregnado con su sangre) permanecerá a un costado del mausoleo donde reposan sus restos.
Fue el 26 de mayo 2020, que el papa Francisco concedió una audiencia al cardenal Ángelo Becciu prefecto Congregación causa de los santos Beccio, y autorizó la promulgación de los decretos de declaración de martirio del Siervo de Dios Cosme Spessotto.
«Este día [ayer] se hace la entronización de las reliquias que, siempre habían estado acá, pero mientras el Papa no reconoce que es beato se tenía guardadas. Ahora las reliquias son motivo de veneración e intercesión. Van a estar cerca de su tumba», indicó.
Por su parte, Sor Aura González manifestó su alegría por la beatificación del mártir e invitó a los jóvenes a no olvidar los principios que Spessotto enseñó durante los años que ofició como sacerdote de San Juan Nonualco.