Tranquilidad y confianza dicen sentir los comerciantes de Zacatecoluca, en el departamento de La Paz, esto como resultado de las medidas de seguridad a través del Plan Control Territorial y del régimen de excepción que impulsa el gobierno del presidente Nayib Bukele en el país, este último con un año de vigencia, una estrategia que ha liberado del flagelo de las pandillas a los salvadoreños.
Las acciones efectuadas hasta hoy no solo mejoran el clima del comercio sino también la convivencia ciudadana, pues ahora no hay limitación a circulación. Antes, muchos no podían visitar Zacatecoluca por ser «de una zona contraria», ya sea de municipios vecinos o de la misma localidad, pero aseguran esta vez los cambios los están presenciando.
La micro, pequeña y grande empresa en esta ciudad fue asediada; sin embargo, algunos de sus representantes consultados confirmaron que el trabajo de la Policía Nacional Civil (PNC) y la Fuerza Armada de El Salvador (FAES), como parte de las acciones dirigidas por el mandatario Bukele son reales.
«Yo siento que la seguridad está mejor ahora, ha cambiado bastante y la gente tiene más confianza en salir. Ya no solo viene a comprar la mamá, sino que la acompañan los hijos, el esposo; también se ve que andan en diferentes lugares que antes no visitaban en la ciudad», manifestó Mariela Vigil, mientras atendía su venta de lácteos en el centro de Zacatecoluca.
En este recorrido, los viroleños no olvidan lo que vivieron, principalmente en la zona de mercados, lugares plagados de delincuentes. Dicen que confían en que será parte del pasado, pero que es necesario tenerlo en cuenta para que se conozca lo que ocurría con los pandilleros en las calles.
«Antes no podía andar uno acá en el mercado porque le salían al paso; «¡mirá viejo, sacate unos $5 ahí!». Recuerdo que una vez me pescaron de la mano y me dijeron ¿y ese reloj? Y le digo yo; bueno y ¿porqué me lo querés quitar, quién necesita más, vos o yo?, entonces, [el pandillero] se quedó mirándome; ´¡andate al carajo abuelo!´ me dijo», contó el adulto mayor, Jesús Ramírez.
«Hoy sí la están viendo de bulto [los pandilleros] gracias al plan del gobierno, porque de tanto gobierno que ha habido no habían tenido esta estrategia, porque los anteriores gobiernos estaban de la mano con ellos [los pandilleros] y ese era el problema que había», agregó el viroleño.
Los vendedores dicen que la seguridad y tranquilidad era lo que esperaba el sector, por ellos y por sus clientes. «Uno está más tranquilo, el comercio mejora, la gente sale con más frecuencia, se ve en el ambiente que no andan con el temor de que les van a hacer algo, salen con más libertad. La seguridad beneficia en todas las áreas», expresó Mirna Díaz, quien tiene una zapatería.

El régimen de excepción cumplió el 27 de marzo un año de vigencia, tras ser prorrogado por la Asamblea Legislativa a petición del Gobierno, con el cual ha sido posible capturar a más de 66,000 pandilleros a escala nacional.
Dicha estrategia sumada al Plan Control Territorial que se implementa desde 2019, ha logrado una reducción sostenible e histórica de homicidios, además de la disminución de delitos como la extorsión, hurto y robo, que mantenían en zozobra a la población.
«Las medidas de seguridad nos han ayudado mucho, hay tranquilidad», confirmó Cristina Cruz, vendedora de ropa de esta ciudad.
Restaurantes, parques municipales y otros sitios de convivencia ahora tienen vida nocturna, de acuerdo con los viroleños. «Hay más gente que sale, vienen al parque [Cañas]. Se ve gente de San Juan Nonualco, de aquí, y no hay problema, no tienen temor, vienen a compartir, a su diversión», comentó Juana López, quien vende sorbetes frente a catedral.
La última encuesta de opinión hecha por el Instituto Universitario de Opinión Pública de la UCA (Iudop-UCA), publicada el pasado martes, detalla que hay mayor aprobación de la ciudadanía al régimen de excepción, que impulsa el Gobierno en el combate a las pandillas, esto debido a los resultados positivos que han permitido al país vivir en paz.
José Antonio Martínez, quien se dedica a comercializar granos básicos considera que las medidas de seguridad son acertadas en favor de la gente honrada, y aunque dice «por lo mismo que ha pasado la gente todavía está temerosa «del vecino que va a la par», tiene que pasar un tiempito para que vayan agarrando confianza porque se ha calmado bastante la delincuencia».