Cuatro personas murieron y muchas más resultaron heridas la noche del sábado pasado en Dadeville (Alabama), según confirmaron ayer por la mañana las autoridades.
Medios locales aseguraron que el tiroteo se dio por la noche en una fiesta de cumpleaños de Sweet 16 -evento similar al que celebran las quinceañeras hispanoamericanas- en el estado de Alabama, en el sur de Estados Unidos (EE. UU.). Dadeville, a unos 80 kilómetros al noreste de Montgomery, está en el este de Alabama y es una localidad de algo más de 3,000 habitantes.
«La investigación es el resultado de un tiroteo que ocurrió aproximadamente a las 10:34 de la noche cerca del bloque 200 de la calle Broadnax en Dadeville, ubicado en el condado de Tallapoosa. Actualmente, se han confirmado cuatro víctimas mortales y múltiples heridos», indicó la Agencia de Cumplimiento de la Ley de Alabama, en un comunicado.
La gobernadora de Alabama, Kay Ivey, escribió en redes sociales que «el crimen violento NO tiene cabida en nuestro estado, y las fuerzas del orden nos mantienen informados a medida que van surgiendo detalles».
La cadena de televisión WRBL reportó ayer una fuerte actividad policial y cintas de bloqueo de escena del crimen alrededor del edificio y sábanas blancas cubriendo partes del piso.
De acuerdo con la cadena local, el tiroteo ocurrió en un salón de baile. La emisora mostró imágenes de la escena del crimen y en una de las ventanas de dicho estudio de baile se observaba el orificio causado por una bala.
El pastor Ben Hayes, capellán del Departamento de Policía de Dadeville y del equipo de fútbol americano del instituto local, explicó que la mayoría de las víctimas son adolescentes. Además, uno de los jóvenes asesinados era un atleta del instituto.
Estados Unidos, con alrededor de 330 millones de habitantes, está repleto de armas -se estima que hay distribuidas unos 400 millones de diferentes tipos-, y los tiroteos masivos con víctimas mortales son algo habitual.
Por otra parte, el sábado por la noche, autoridades confirmaron que dos personas murieron y otras cuatro resultaron heridas en un tiroteo en Louisville, Kentucky, la misma ciudad donde un hombre armado asesinó a cinco personas en un banco el lunes pasado.