Con miras a garantizar una cosecha histórica de granos básicos, el Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG), ha iniciado inspecciones para determinar la presencia de la llamada langosta voladora en varias zonas del país, un insecto que en su edad adulta se congrega, forma mangas y migra de una zona a otra y puede acabar con grandes extensiones de cultivos.
Para verificar la presencia de la langosta voladora, y controlar la evolución, el MAG desplegó a un grupo de técnicos de la Dirección General de Sanidad Vegetal en áreas de cultivos de los municipios de San Vicente, Tecoluca, así como en otras zonas del país.
La exploración para descubrir la existencia del insecto, llamada «vigilancia acridiana», se llevó a cabo en 30 manzanas de la zona La India, en el cantón Volcán Bajo Opico, de San Vicente, donde se cultivan granos básicos, hortalizas y frutas.
Según el Organismo Internacional Regional de Sanidad Agropecuaria (Oirs), la prospección acridiana son las actividades de exploración y muestreo para detectar o cuantificar poblaciones de langosta.
Jessica Valladares, técnico del Área de Vigilancia Fitosanitaria, de Sanidad Vegetal del MAG, explicó que durante las exploraciones se determina las densidades poblacionales del insecto, ya que es el momento oportuno de control, para evitar formaciones de mangas y que migre a otros cultivos.
Además, durante las exploraciones los técnicos hacen diferentes observaciones como estados ninfales, cambio de color, comportamientos de grupos, estimación de población. Después, les indican las acciones de control a los agricultores, quienes ya fueron capacitados al respecto.
En las inspecciones -en la zonas antes mencionada-, el MAG estimó que la densidad poblacional de ninfas (estado inmaduro del insecto) es media.
«De no controlar a tiempo, este insecto forma mangas y migra de una zona a otra y puede acabar con grandes extensiones de cultivos; por eso es de que los especialistas mantienen los monitoreos», dijo Valladares.
Por otra parte, la técnica encargada puntualizó que similares esfuerzos se ejecutan en otras zonas, sumando más de 1,500 manzanas las que se vigilan entre Tecoluca y San Vicente.
Del análisis de la evolución de la langosta voladora depende tomar la decisión de recomendar controles a los agricultores, a quienes se les ha brindado capacitaciones y entrega de productos para la exterminación de plagas.
A finales de mayo, la época en que iniciaba el invierno, en La India, San Vicente, los técnicos hicieron una aplicación de «Metarhizium acridium», un insecticida microbiológico amigable con el medio ambiente.
Los técnicos hacen el llamado a los productores a mantener la vigilancia en estas zonas acridianas y en caso de que detecten incrementos de poblaciones deben reportarlo al Área de Vigilancia Fitosanitaria del MAG.
