Por 12 años Cruz Antonio Rivera se estuvo burlando de la justicia salvadoreña, huyó a Honduras cuando se enteró que había sido denunciado por la familia de la víctima a quien había violado en tres ocasiones durante el 2018.
El anciano delincuente nunca se imaginó que tarde o temprano el peso de la justicia salvadoreña caería sobre su persona.
Este caso fue investigado por fiscales de la Unidad de Atención Especializada para la Mujer, Niñez y Adolescencia de la sede de Ilobasco, Cabañas, cuyas audiencias fueron realizadas en el Juzgado de Sentencia de Sensuntepeque por el delito de violación.
Ante el juez del caso, los fiscales demostraron que Rivera sí cometió el delito por el cual fue procesado judicialmente. Durante la audiencia de vista pública, fueron valoradas todas las pruebas presentadas, ante las cuales el juez no dudó en condenar al criminal a 14 años de prisión.
«Este caso estuvo a punto de prescribir, ya que el imputado estuvo prófugo de la justicia por mucho tiempo. Cuando él pensó que ya todo había quedado en el olvido decidió regresar al país. Nosotros recibimos un informe sobre su regreso, e inmediatamente ordenamos su captura y, posteriormente, presentarlo para que enfrentara la justicia», explicó una fiscal.