El pasado 10 de mayo finalizó con un registro de cero homicidios a escala nacional, por lo cual la administración del presidente Nayib Bukele alcanzó los 365 días sin homicidios, un año completo sin muertes a causa de la violencia durante los casi cuatro años de la gestión del mandatario que asumió su cargo en 2019.
Este logro se le atribuye a la estrategia pública de seguridad con el Plan Control Territorial como estandarte, sumando el régimen de excepción, vigente desde marzo de 2022, que permitió brindar resultados más significativos en la reducción de homicidios diarios, extorsiones, entre otros delitos. Durante este período se desarticuló a las pandillas en El Salvador.
El país contabilizó su cuarto día consecutivo sin asesinatos, y sumó ocho días sin muertes violentas en todo lo que va del mes de mayo.
El Salvador también acumuló 95 días sin asesinatos en lo que va del año, de los cuales 22 pertenecen al mes de enero, 21 a febrero, 20 a marzo, 24 al mes de marzo, y ocho al mes de mayo, según detallan las estadísticas oficiales de la Policía Nacional Civil (PNC).
El régimen de excepción, implementado a petición del presidente Nayib Bukele, y aprobado por la Asamblea Legislativa, ha permitido que las autoridades lograsen sacar de las calles a más de 68,000 pandilleros que mantenían atemorizada a la población.
La PNC, en conjunto con la Fuerza Armada, han incautado más de 2,700 armas de fuego, más de 3,610 vehículos y más de 16,500 teléfonos celulares a las pandillas, y a sus colaboradores.
Por otra parte, el reconocido criminólogo Ricardo Sosa proyecta que El Salvador cerrará el 2023 con una tasa de homicidios de 1.9 y 2.5 homicidios por cada 100,000 habitantes, fundamentado mediante datos y evidencia de estadísticas oficiales del Gobierno de El Salvador.
Durante la gestión del presidente Bukele, El Salvador logra posicionarse como el país con la tasa más baja de homicidios en Centroamérica, y uno de los más seguros de toda Latinoamérica.