Nació en Estados Unidos, pero su familia viene de Usulután y siempre le enseñaron que, ante todas las cosas, por sus venas corre sangre azul y blanco de la tierra cuscatleca. Se crío en una familia cristiana y rodeado de música, por lo que su propósito de vida rápidamente fue descubierto: ser la mente creativa detrás de las canciones más exitosas del mundo.
Ahora, Nain Padilla, conocido artísticamente como «Ninesoul», ha trabajado con Anuel y Eladio Carrión, en dos álbumes que lograron llegar a los primeros puestos en los listados de preferencia en Estados Unidos, consolidando así su carrera en suelo norteamericano y abriéndose paso como uno de los productores más exitosos en la industria de la música actual.
Sin embargo, hay aún un deseo en su corazón: apoyar al talento musical de El Salvador. En este año ya impulsó un breve proyecto para conocer a jóvenes con talento para el arte y la música. Pero, ahora, se proyecta algo más grande para darle un impulso a la juventud del país y permitirles que luzcan todo su talento en los mejores escenarios de la industria de la música.
Hablemos primero de tu carrera musical. Dentro de tu trayectoria como productor, ¿con qué artistas internacionales has trabajado?
Ahorita soy productor e ingeniero de sonido en Los Ángeles. Tuve la oportunidad de trabajar, en 2022, en el álbum de Anuel, «La Leyenda Nunca Muere», en ese proyecto en el que produjimos una canción que se llama «North Carolina», que fue en colaboración con Eladio Carrión. Esta fue la primera colaboración entre ambos y significó mucho para mí ser parte de este proyecto porque fue una colaboración muy grande que nunca se había visto.
Ese mismo año salió el álbum de Eladio Carrión en el que también trabajé en dos canciones. Es uno de los proyectos que me ha abierto muchas puertas. El álbum de Anuel fue #1 y luego el de Eladio era el #2 en los listados, por lo que fue un orgullo para mí ser parte de ambos proyectos.
Toda está pasión por la música y por crear canciones, ¿cuándo nació?
Yo crecí en una familia cristiana, así que la música siempre fue parte de mí. Mi papá siempre escribió canciones y tocaba la guitarra, mi familia también tocaba la guitarra, así que la música fue parte de mí. A veces, de pequeños, nos dicen que mejor seamos doctores o cualquier otra cosa, pero cuando le dije a mi papá que yo quería hacer música, me apoyaron. Les dije que quería ser el productor, el que está detrás de la música y, desde ese momento, sentí el apoyo de mis padres y de mi familia. Ha sido difícil, pero ahí vamos, echándole ganas, poco a poco.
¿Hay otros artistas con los que hayas trabajado en estos años como productor?
Por ahora con estos dos artistas, así reconocidos mundialmente. Pero, he trabajado canciones con otros artistas, también de alto nivel, aunque algunas no han salido. He trabajado también con muchos artistas salvadoreños acá en Estados Unidos, con quienes queremos desarrollar otros proyectos.
Desde tu experiencia como productor y tras trabajar con artistas como Anuel y Eladio Carrión. ¿Cuál crees que es la clave para que un álbum y una canción sean exitosos en la actualidad?
Una canción tiene que tener un mensaje. Mucha música ahora ya no tiene mensaje. Se hacen discos cada dos o tres semanas y eso hace que pierda calidad. Cuando una persona se toma su tiempo en el proyecto y en la calidad de música que se va a producir, para hablar con otros productores y tener mente abierta a otras opiniones, eso hace que se haga un mejor trabajo. Es clave tomarse el tiempo para perfeccionar el trabajo y para perfeccionar cada canción.
Las cosas salen mejor cuando uno se toma su tiempo y no corre solo porque otras personas están corriendo. Con esto, con tiempo, uno aprende a trabajar mejor. No se trata solo de sacar canciones, porque se vuelven canciones que se olvidan en una semana. Lo viejito siempre va a durar porque hay calidad de música y eso es lo que está en mi corazón, hacer música con esa calidad y que no sea olvidable.
Ya con una trayectoria establecida en Estados Unidos, ¿tienes planes para trabajar en El Salvador o con más artistas salvadoreños?
Claro que sí. Estuve ahí hace una semana y pude hacer un campamento con muchos muchachos. Juntamos a casi 12 muchachos, con quienes trabajamos con otros productores. Pudimos hablar con los chicos y compartir con ellos. Vimos a muchos salvadoreños unidos y con deseo de trabajar. Esa fue una gran experiencia y poder verlos trabajar. Esa no será la primera vez. En marzo queremos hacer otro campamento para enseñarles que podemos trabajar juntos para salir adelante. En estos momentos no podemos salir adelante en solitario. Uno tiene que ser humilde y todos debemos apoyarnos entre todos.
Para El Salvador tengo demasiados planes y sé que Dios me los va a cumplir. Ya dimos un primer paso este pasado tiempo, que no fue muy planeado. Para la otra ocasión queremos hacerlo más planeado para enseñarles no solo sobre música, sino sobre el negocio y la industria de la música.
¿Ves talento y deseo de triunfar en El Salvador?
Miro que hay mucho talento, hay mucho muchacho haciendo con lo que tiene. Acá en Estados Unidos uno se queja por todo lo que no tiene. Pero allá, en El Salvador, en un cuarto y con pocas cosas hay muchos muchachos haciendo grandes cosas.
En El Salvador conocí muchos chicos talentosos que si tuvieran todas las herramientas que tenemos acá harían cosas mucho mejores. Creo que hay mucho talento en El Salvador, solo hace falta darles confianza, impulsarlos y decirles que creemos en ellos. Hay mucho talento en El Salvador. Los artistas nacionales se están motivando más y eso traerá muchas cosas buenas al país.