Con carne asada, chorizo, ceviche, diferentes tipos de bebidas y música, los aficionados salvadoreños, incluyendo familiares de algunas seleccionadas, le pusieron buen ambiente a la previa del partido.
Manuel Perla, un migueleño originario de la colonia Chaparrastique, residente en Los Ángeles manifestó que acudía por primera vez a ver a la selección femenina.

«Hay un mejor futuro con la selección femenina que con la varonil.Además, hay muchas de las seleccionadas que están jugando afuera [en el extranjero ]», dijo Perla justificando su interés en la femenina.
A él lo acompaña su esposa guatemalteca y otros aficionados de ese país, que convivían en armonía junto a los hinchas salvadoreños.

«Siempre venimos a apoyar a Guatemala y estamos compartiendo en familia y con amigos», dijo Érick Marroquín, guatemalteco residente en Los Ángeles.
Asimismo, un grupo de 11 personas, en su mayoría familiares y amigos mexicanos de la seleccionada Ámber Marinero, con parrilla, diversos alimentos y bebidas llegaron a tempranas horas de la tarde y se instalaron en un sector del parqueo del Dignity Health Sports Park, previo al partido.

«Es un honor que mi hija represente a mi patria, siempre apoyamos a mi hija, hemos ido a Panamá, a Honduras , Nicaragua, a todos lados. Hoy ganamos 3-1», dijo Nelson Marinero, padre de Ámber.
La cantidad de hinchas guatemaltecos y salvadoreños estuvo dividida y durante el partido estuvieron apoyando a sus jugadoras.
Muchas personas se acercaron al estadio en busca de boletos, pero y estaban vendidos desde hace muchos días, por lo tanto, algunos decidieron mirar el partido desde sectores aledaños al campo de juego. El hincha, al fin y al cabo, busca de cualquier forma alentar a su selección.