A puerta cerrada, la empresa estadounidense propuso a los organizadores de la cumbre escenarios energéticos contrarios a los objetivos climáticos que defiende públicamente, revela una investigación de la AFP.
Una «propuesta de transición energética» redactada por la empresa y obtenida por la AFP reduce el uso de petróleo en un 50% para 2050, y exige billones en nuevas inversiones de petróleo y gas.
McKinsey – que tiene entre sus clientes a ExxonMobil y a la empresa estatal saudita Aramco – es una de las varias consultoras que asesora gratuitamente a Emiratos Árabes Unidos, anfitrión de la COP28, que comienza el 30 de noviembre en Dubái.
Las negociaciones serán presididas por Sultan Al Jaber, que dirige la empresa petrolera emiratí ADNOC, lo que ha causado polémica.
Los científicos aseguran que 2023 será el año más caluroso registrado en la historia y las emisiones de gases de efecto invernadero alcanzan niveles sin precedentes.
Pero McKinsey «está pidiendo vehemente y desvergonzadamente menores niveles de ambición en el abandono gradual del petróleo a las más altas instancias de la presidencia de la COP28», declaró una fuente que forma parte de las discusiones confidenciales de los organizadores de la cumbre.
McKinsey respondió afirmando que «la sostenibilidad es una prioridad fundamental» y que está comprometida a ayudar a sus clientes a descarbonizarse.
«Estamos orgullosos de apoyar la COP28 aportando nuestra visión y análisis estratégicos, así como nuestra experiencia sectorial y técnica», declaró a la AFP.
«Escrito por la industria petrolera para la industria petrolera»
Consultoras competidoras de McKinsey que operan en Dubái trabajan con miras a encontrar soluciones climáticas reales, según tres fuentes que han participado en encuentros preparatorios de alto nivel que pidieron no ser nombrados porque estas reuniones son confidenciales.
«Pero estaba muy claro desde un buen comienzo que McKinsey tenía un conflicto de intereses», aseguró una fuente que participó en discusiones de la presidencia de la COP28.
«Daban consejos al más alto nivel que no eran lo más deseable para el presidente de la COP, como líder de un acuerdo climático multilateral», apuntó esta fuente.
En lugar de eso, le decían lo que quería escuchar como responsable de una compañía petrolera, añadió esa fuente.
Documentos confidenciales a los que tuvo acceso la AFP respaldan esta afirmación.
Un borrador de un documento preparado por McKinsey para la presidencia de COP28 parece que «estuviera escrito por la industria petrolera para la industria petrolera», asegura un experto que lo analizó.
«Esto claramente no es un camino creíble rumbo al cero neto» de emisiones, afirmó Kingsmill Bond, del centro de reflexión Rocky Mountain Institute, a la AFP.
Un portavoz de la COP28 confirmó a la AFP que «McKinsey apoya la COP28 aportando ideas y análisis de forma gratuita». Pero decir que la empresa presentó escenarios incompatibles con los objetivos climáticos mundiales «es simplemente incorrecto», añadió.