Andrés Valencia, el niño de 11 años que ha sido apodado como «el pequeño Picasso» por el estilo que transmite en los lienzos cuyo precio promedio ronda los $150,000, es la última sensación en el mundo del arte por su talento a su tan corta edad, según indicó BBC.
«El pequeño Picasso» fue el centro de atención en el Art Miami celebrado el primer fin de semana de diciembre, en donde se vendieron todas sus obras, un logro significativo considerando que se trata de una de las ferias de arte contemporáneo más importantes de Estados Unidos.
Por otra parte, en la galería de arte SoHo, durante su primera exposición en solitario, también logró vender las 35 obras valoradas entre los $50,000 y $125,000.
Celebridades como Sofía Vergara, Tommy Mottola y Channing Tatum han adquirido las obras de Andrés Valencia para que formen parte de sus colecciones de arte, además, el cantante V de BTS también ha compartido los trabajos del joven artista.
«¡Gracias @andresvalenciaart por esta preciosa obra de arte! Desde que vi por primera vez tu trabajo, soy fan», publicó V de BTS, cuyo post ya cuenta con 9 millones de Me gusta.
Por su parte, su madre de 48 años que ejerce como psicóloga clínica cuenta que «le piden entrevistas casi a diario. Nos han llamado de los talk shows principales, pero les hemos dicho a todos que no (…) Mi hijo es un artista, pero no es un celebrity. Es, ante todo, un niño. Queremos que vaya a la escuela, que estudie música, que toque el piano, que aprenda a leer y escribir en español, que salga con sus amigos al parque».
Corazón altruista
Los padres de Andrés, californianos de ascendencia mexicana, desean que su hijo se desarrolle en una vida dentro de una familia normal, y que el pequeño pintor apoye a la comunidad con sus ganancias.
«No nacimos en la abundancia. Y yo antes de ser terapeuta clínica, fui trabajadora social durante muchos años, trabajé en casas de acogida y en entornos penitenciarios, y he visto de cerca qué es ser un desfavorecido. Nosotros somos muy muy afortunados», cuenta la madre de Andrés.
El dinero recaudado mediante las pinturas de Andrés ha sido donado a UNICEF y organizaciones como amfAR, también ha sido destinado a los niños sumidos en la guerra entre Rusia y Ucrania a través de la Fundación Klitschko.
Diferente desde siempre
La madre de Andrés cuenta que el pequeño Picasso siempre fue diferente, ya que «cuando tenía unos cuatro años y dibujaba, yo solía corregirlo». «’¿Andrés, tenemos dos ojos, no tres. ¿Y por qué estás haciéndole la nariz donde va la oreja? No hagas así la cara’» le decía al pequeño artista.
Cuenta que dejó de hacerlo después de ver a sus compañeros de primer grado embelesados con los dibujos que acababa de hacer durante la celebración de Halloween en clase.
«A partir de ese día, di un paso atrás y no volví a interferir. Simplemente le dejé ser y crear», cuenta su madre.
Andrés es un niño autodidacta que nunca ha recibido clases de pintura, y que se ha tomado el tiempo de empezar con bocetos en el estudio de su madre inspirado en sus artistas favoritos. Ahora, el niño prodigio, destaca en todo el mundo por su talento nato que ha dejado boquiabiertos a los amantes del arte.