«Nos mataron sin pensarlo dos veces», dijo el joven de 20 años, que estaba siendo tratado por una herida de bala en el hombro, y aseguró que iban «desarmados».
Según su testimonio había «cuerpos destruidos, piernas rotas y ninguna justificación», dijo a la AFP el viernes.
Para evitar que una secta religiosa realizara una manifestación contra las fuerzas de paz de las Naciones Unidas en la ciudad de Goma, los soldados congoleños lanzaron una operación y entraron en una estación de radio y un lugar de culto, según fuentes locales.
Un policía también fue linchado en los disturbios.
Las autoridades habían prohibido la manifestación unos días antes.
«Los soldados llegaron muy temprano, incluso antes de que comenzara la marcha», dijo el joven, que formaba parte del grupo religioso y ahora está siendo atendido por la Cruz Roja en un hospital de Goma.
Su nombre no fue divulgado para su seguridad.
Según un funcionario de la Cruz Roja, «los heridos, todos por armas de fuego, comenzaron a llegar a las 04H00 de la mañana» hasta alcanzar más de 90 pacientes al final del día, la mayoría de ellos con «lesiones torácicas y abdominales muy graves».
El jueves, el gobierno cifró en 43 los muertos, además de 56 heridos y 158 personas detenidas.
Un documento interno del ejército consultado por la AFP el jueves y verificado por funcionarios de seguridad dio un saldo de 48 muertos, además del policía muerto, y 75 personas heridas.
El documento también dice que los soldados arrestaron a 168 personas, incluido el líder del grupo cristiano-animista, llamado «Fe Natural Judaica y Mesiánica Hacia las Naciones».
La ONU ha pedido una investigación independiente.
El este de la RDC lleva tres décadas sufriendo la violencia de las milicias, un legado de las guerras regionales de los años 1990 y 2000.
La misión de mantenimiento de la paz de la ONU es una de las más grandes y costosas del mundo, con un presupuesto anual de aproximadamente mil millones de dólares.
Pero la fuerza, conocida como Monusco, es a menudo criticada y muchos creen que es demasiado pasiva para prevenir conflictos.
El año pasado, decenas de personas murieron en protestas contra la ONU, incluidos cuatro miembros de mantenimiento de la paz.
