La tasa de mortalidad por la COVID-19 ha aumentado en los últimos meses en Guatemala, de acuerdo con los datos publicados por el Ministerio de Salud local. Entre estos están los 45 decesos de niños de cero a nueve años, según el detalle de la última semana. Otros 54 niños y jóvenes de los 10 a los 19 años también han fallecido.
En adición, 7,305 menores entre los cero y los 10 años han padecido el virus. Los datos corresponden al último año. En general, la tasa de mortalidad por cada 100,000 habitantes el pasado 6 de enero correspondía a 29.2.
En tanto, hasta el 5 de mayo, la tasa de muertes por cada 100,000 habitantes era de 45.3, lo que refleja una letalidad del 3.2 %.
A inicios de enero, Guatemala se convirtió en el primer país de Centroamérica en sobrepasar el umbral de 5,000 muertes por la COVID-19. Hasta este 4 de mayo, ese dato se ha elevado a 7,642. De estas fatalidades, el 70 % son hombres y el 30 %, mujeres.
El departamento más afectado por la COVID-19 es Guatemala, que concentra 3,600 decesos, para una tasa de mortalidad de 102.3. En este departamento de la zona metropolitana también se suma la mayor parte de los casos de la COVID-19 a escala nacional, con más de 111,400 confirmados de los 231,289 acumulados desde marzo de 2020.
En muertes, al departamento de Guatemala le sigue Quetzaltenango, aunque con una marcada distancia, ya que acumula 581 fatalidades por el coronavirus.
Luego, en Escuintla se han registrado 379 muertes acumuladas, mientras que en San Marcos ha habido 296. En Sacatepéquez se alcanzaron los 291 muertos y en Izabal el dato llegó a 230.
De los 22 departamentos que conforman Guatemala, Jalapa es el que menos casos mortales ha acumulado (52).
El presidente Alejandro Giammattei decidió, el 28 de abril, que Guatemala regresaría a las restricciones definidas bajo zonas epidemiológicas. De acuerdo con el sistema de alertas sanitarias, hay 138 municipios en alerta roja, 148 en naranja y 54 en amarilla. El nivel de positividad de casos a escala nacional es de 15.70 %.