Nació con la misión de servir y proteger las vidas de los salvadoreños sin importar a qué hora, en qué lugar o en qué momento se presente una emergencia. Su principal característica es el servicio y su vocación por ayudar a los demás debe ser pura y de corazón. Son héroes que todos los días se alistan para auxiliar a los que más los necesitan en todo tipo de situaciones y cumplen su juramento durante todos los años de su carrera.
Ellos son el Cuerpo de Bomberos de El Salvador, una institución que este año 2021 cumple 138 años de fundación, un tiempo durante el cual han estado en pie de lucha siempre arriesgando hasta sus vidas con tal de proteger la de los salvadoreños. Desde situaciones cotidianas hasta desastres naturales, en más de 100 años de vida, Bomberos ha atendido todo tipo de situaciones en El Salvador.
Una historia de vida de más de un siglo
Cuerpo de Bomberos de El Salvador fue oficializado el 12 de febrero de 1883, durante el mandato de Rafael Saldívar, mediante un decreto legislativo publicado en el Diario Oficial No 48 el día de 25 de ese mes. Ese mismo año se decretó también la creación de la Policía Urbana.
Las primeras cuatro bombas contra incendios que vinieron a El Salvador fueron gestionadas por Eugenio Aguilar y Manuel A. Párraga, considerados como pioneros de la institución. Cada una de esas bombas tenía capacidad para lanzar un chorro de 100 galones de agua por minuto, alcanzando una altura máxima de 120 pies.
El primer Cuerpo de Bomberos fue integrado por 20 miembros: dos sargentos y 18 bomberos, divididos en dos comisarías. Las bombas eran abastecidas llenándose continuamente los tanque-depósito del agua con baldes o poniendo un succionador colocado en una vertiente cercana en aquella época.
Cada bomba tuvo un costo de $325 y estaban montadas sobre ruedas de 32 pulgadas de diámetro con 75 pies de manguera de hilo y 25 baldes de lona. Además, pesaban aproximadamente 1,500 libras cada una y se requerían 12 personas para operarlas. Estas cuatro máquinas fueron bautizadas con los siguientes nombres: No.1 Salvador, No.2 Guatemala, No.3 Nicaragua y No.4 Honduras.
Bomberos se establece en San Salvador
Desde su formación, Bomberos compartió localidad con la Policía Nacional, pero en 1961 la institución fue trasladada a un local ubicado en el Paseo Independencia, en San Salvador. Para 1962 se trasladaron las instalaciones hacia la calle Francisco Menéndez, en el Barrio Santa Anita, siempre en la ciudad capital. En este local es donde se mantienen operando hasta el momento.
Desde su creación, Cuerpo de Bomberos fue parte del Ministerio de la Defensa. Sin embargo, tras la firma de los Acuerdos de Paz, en 1992, pasó a formar parte de las instituciones que componen el Ministerio de Gobernación y la Dirección Nacional de Protección Civil.
Más de un siglo de incendios controlados
A lo largo de su historia, Bomberos ha atendido incendios de grandes proporciones, los cuales han quedado registrados en la historia de El Salvador. Uno de ellos sucedió el 18 de febrero de 1910, cuando el Teatro Nacional se vio afectado por las llamas. Otro siniestro histórico atendido por la institución pasó el 8 de agosto de 1915 y fue en Catedral Metropolitana.
El 9 de diciembre de 1955, las llamas atacaron a la Universidad de El Salvador, pero Cuerpo de Bomberos logró controlar la emergencia. El 2 de noviembre de 1966, el Mercado Excuartel también fue una de las localidades históricas en las que Bomberos tuvo participación para contener el siniestro.
En 1988, el 13 de marzo, varios locales del Centro Histórico de San Salvador fueron invadidos por las llamas y Bomberos entró en acción para controlar la emergencia. Otro de los incendios muy recordados en El Salvador sucedió el 11 de julio de 2002, cuando las instalaciones de Canal 4 se incendiaron. El siniestro fue de grandes proporciones y obligó a Bomberos a desplegar un gran número de unidades para contenerlo.
El sábado 5 de diciembre por la tarde, Bomberos atendió la emergencia surgida en Soyapango cuando estalló una planta de gas propano ubicada en la colonia Montecarmelo. Ahí, una fuga de gas provocó explosiones que terminaron en un incendio que, gracias a la intervención rápida de Cuerpo de Bomberos y el personal de la planta, pudo ser controlado evitando así una desgracia mayor.
Sin duda alguna, Bomberos ha escrito una página de valentía y tenacidad a lo largo de estos años. Son héroes que están al servicio de la población y que merecen total reconocimiento por su incansable labor.