La Asamblea Legislativa prorrogó el régimen de excepción por un mes más para continuar la vigencia de las herramientas legales que permiten la guerra contra las pandillas. Como ya es costumbre, partidos de oposición como el FMLN, VAMOS y Nuestro Tiempo votaron en contra, en tanto que los legisladores de ARENA se abstuvieron (que es otra forma de negar los votos), en una clara muestra de sus componendas en contra del pueblo salvadoreño y a favor de los delincuentes.
El Gabinete de Seguridad del Gobierno del presidente Nayib Bukele presentó la propuesta para continuar con el régimen de excepción, el cual ha demostrado ser eficaz para reducir drásticamente la tasa de homicidios, que ha llevado a El Salvador a ser el país más seguro de Latinoamérica, incluso con números mejores que los de Canadá.
La sensible mejora en el clima de seguridad que vive el país es una de las principales razones por las cuales el presidente Bukele tiene el decidido respaldo del pueblo, que ha expresado, a través de varias encuestas, su deseo de que continúe su trabajo en el próximo quinquenio.
Los salvadoreños evalúan de la mejor forma los esfuerzos del Gobierno del presidente Bukele para preservar la vida de todos, por mejorar las condiciones económicas, de salud y la educación, y por mejorar las carreteras.
En la base de todo, sin embargo, está la seguridad. En lo que va de enero, por ejemplo, van ocho días con cero homicidios, en tanto que diciembre de 2022 ha sido el mes más seguro en toda la historia nacional. En la gestión del presidente Bukele ha habido 278 días sin asesinatos, de los cuales 170 han sido durante la vigencia del régimen de excepción, lo que respalda con hechos incuestionables la eficacia de la implementación de estas medidas extraordinarias para frenar la violencia homicida.
En comparación, en los 10 años que gobernó el FMLN solo hubo un día sin homicidios, durante la gestión del prófugo Salvador Sánchez Cerén, en tanto que el promotor de la tregua de las pandillas y también procesado por corrupción, Mauricio Funes, no tuvo un solo día sin muertes violentas.
Las pandillas surgieron durante los gobiernos de ARENA, que toleró la violencia homicida para luego ver prósperos negocios de agencias de seguridad ligados a miembros de ese partido. El excandidato presidencial arenero Norman Quijano estaba pactando con pandilleros durante la campaña y huyó del país para evitar enfrentarse a la justicia.