La concejala de la Alcaldía de San Salvador por ARENA, Arlyn Rivas, presentó este viernes 29 de enero un documento en el que solicita la nulidad del proceso que se ha abierto en su contra para su expulsión del partido tricolor.
El proceso de expulsión de Rivas del partido de derecha es impulsado por Erick Salguero, presidente de ese instituto político. Rivas exige que se anule ya que considera que se han producido irregularidades, como el no haberle notificado las causas que motivan la expulsión de la entidad partidista.
«El lunes, a eso de las 4 de la tarde, me llega un correo electrónico de parte del Tribunal de Primera Instancia del partido notificándome que tengo seis días para presentar pruebas sobre un proceso que me han iniciado de expulsión del partido. Yo doy respuesta el martes que a mí no se me había notificado de la debida forma para poder ejercer mi derecho. No sé de qué es lo que se me está imputando para ser acreedora de la sanción», asegura Rivas.
«No tengo conocimiento a qué se debe el proceso de expulsión porque no tengo conocimiento de cuál es el contenido de la denuncia. La apertura de los seis días de prueba dice que es una denuncia interpuesta por el presidente del partido y por la diputada suplente miembro del Coena. Yo estoy pidiendo que puedan anular este proceso e iniciar uno nuevo. No estoy en contra de someterme a las instancias del partido siempre y cuando no se violenten mis derechos de defensas», agregó.
Rivas asegura que este proceso en su contra podría estar motivado por las declaraciones que ha brindado en ocasiones anteriores en las que hace señalamientos sobre la mala administración que el alcalde de San Salvador, Ernesto Muyshondt, ha hecho en la comuna capitalina.
«Yo le atribuyo esto a las diferencias que hemos tenido debido a los señalamientos que yo he estado efectuando de la mala administración que está realizando el alcalde Ernesto Muyshondt», declaró Rivas.
La concejala explicó que en enero de 2020 fue nombrada directora de Desechos Sólidos Ad Honorem, en un momento en que San Salvador vivió una crisis de acumulación de basura debido a la huelga sindical de más de 15 días debido al impago de retenciones salariales. Rivas señaló que el alcalde accedió a establecer un plan de pago en ese momento. Sin embargo, al ser colocada en ese cargo, se percató de los planes de privatizar el servicio de recolección de basura.
«Llegando empecé a ver y me doy cuenta del tema de la privatización de la basura con la empresa ATESA. Yo me niego a darle continuidad porque eso sería poner en riesgo el trabajo de 1,500 trabajadores de la dirección de desechos sólidos». Rivas agregó también que, como concejo municipal, no se les ha explicado qué ha pasado con el dinero del pago de las retenciones salariales de los empleados municipales.