Este día se vivió un cuarto viernes de Cuaresma en el Centro Histórico de San Salvador.

Por primera vez, después de muchos años, la procesión del Vía Crucis atravesó la calle de La Amargura, totalmente despejada.

La procesión parte desde la Iglesia San Esteban, y transita hacia la Iglesia El Calvario, ahora totalmente visible luego de que se desmontaran los puestos de los vendedores por cuenta propia.

En esta ocasión, la calle luce completamente limpia, y los capitalinos podrán transitar libremente por la zona, gracias a los trabajos de la alcaldía de San Salvador.

Un promedio de 1,400 puestos de ventas de comerciantes por cuenta propia ubicados en la zona sur del Centro Histórico capitalino fue desmontado entre el lunes pasado y el jueves, después de que la alcaldía de San Salvador logró —por medio de diálogos pacíficos— la movilización voluntaria de los vendedores con el fin de recuperar el espacio público.



