El ministro de Agricultura, Óscar Guardado, informó que como parte de las estrategias del Gobierno del presidente Nayib Bukele para asegurar la sostenibilidad medioambiental, el país avanza en la implementación del Plan Nacional de Bambú.
«Habrá todo un programa de bambú a nivel nacional, cero plásticos y cuidar el medio ambiente. Haremos una agenda verde para producir alimentos cuidando el medio ambiente», expresó.
Una de las instituciones involucradas en este plan es el Instituto Salvadoreño de Transformación Agraria (ISTA), a través de la cual se ha creado un vivero o banco de germoplasma que permitirá tener plantas de calidad.
Según el jefe del vivero, Salomón Linares, esta estrategia servirá como un importante aliciente a la protección del medio ambiente debido a la idoneidad de la planta de bambú para sustituir a materias primas que se utilizan para la producción de artículos de primera necesidad.
«Con el desarrollo del vivero de bambú apostamos establecer plantaciones comerciales y estructurales a fin de procesar y elaborar madera para sustituir aquellos productos que afectan y dañan el medio ambiente, de esa forma ponemos en marcha el Plan Nacional del Bambú», sostuvo el ISTA.
El Gobierno también ha destacado el uso del bambú para otros efectos como el control de la erosión de los suelos en zonas vulnerables, como el que se realizó el año pasado en la colonia IVU de San Salvador, en las cercanías del río Arenal.
En esa zona fueron sembradas más de 250 plantas de bambú para prevenir deslaves que ocurren en el lugar en la temporada de lluvias.
«A parte de que sirve como barrera viva, la comunidad le podrá dar otros usos, para artesanías o como sustituto de madera para alguna actividad dentro de sus casas», sostuvo. Algo más importante es que en términos medioambientales es utilizada como fijación de carbono, que contribuye al cambio climático porque purifica el aire», explicó el coordinador de Recursos Forestales de la Dirección General de Ordenamiento Forestal, Cuencas y Riego del MAG, Amílcar López.