Charles Spencer expresó su malestar por la investigación independiente impulsada por la BBC sobre la manera en que uno de sus periodistas, acusado de falsificar documentos, obtuvo una entrevista con su hermana, la princesa Diana, en 1995 en la que esta relató la ruptura de su matrimonio.
«He dicho a la BBC que no estaba en absoluto satisfecho de los parámetros fijados para esta investigación sobre la entrevista de Diana», dijo, en un tuit, en el que reprochó al grupo audiovisual británico que haya limitado la amplitud temporal de la investigación.
La entrevista, vista por 22,8 millones de británicos, cayó como una bomba: la princesa, que murió dos años después en un accidente de coche en París, dijo que había «tres personas» en su matrimonio, refiriéndose a la relación de Carlos con Camila Parker Bowles. Al mismo tiempo, admitió tener ella misma una aventura.
Veinticinco años después, el hermano de la princesa, el conde Charles Spencer, acusó a su autor, el periodista Martin Bashir, de haber falsificado documentos para obtenerla, concretamente estados de cuenta bancarios -que resultaron ser falsos- para probar que los servicios de seguridad pagaban a dos personas para espiar a su hermana.
«Si no hubiera visto esos estados de cuenta, jamás habría presentado a Bashir a mi hermana», dijo Spencer en una carta a la BBC, denunciando métodos «deshonestos».
La investigación examinará la conducta de Bashir, al que esta exclusiva propulsó a nivel internacional, y examinará los «supuestos registros bancarios».
También estudiará de cerca lo que la BBC sabía y si la institución protegió a su periodista a sabiendas.
El miércoles, el príncipe Guillermo, hijo de Diana, recibió con satisfacción el inicio de una investigación y dijo que era «un paso en la dirección correcta».
Diana y el príncipe Carlos se separaron en 1992 y se divorciaron en 1996. El príncipe, heredero de la corona, se casó con Camilla en una discreta ceremonia civil en 2005.