Tuvimos una charla con God Save the Queen, el grupo argentino que realiza el mejor tributo a la legendaria banda Queen en todo el mundo. Este 22 de marzo presentarán su aclamado espectáculo en El Salvador, en las instalaciones de Salamanca.
Ezequiel Tibaldo, el bajista de la banda, fue el encargado de ofrecer todos los detalles sobre el show que presentarán para los salvadoreños y profundizó sobre los motivos que los llevaron a interpretar a una de las bandas más aclamadas en la historia de la música.

¿Cuál es la diferencia entre lo que ustedes hacen como espectáculo a otros tributos que también existen de la famosa banda Queen?
Lo que hacemos, desde hace más de 25 años, es ir puliendo este espectáculo para que cada vez la sensación sea como estar en un show real de Queen. Esto implica no solo tener en cuenta el aspecto musical que tratamos de imitar al detalle, sino también lo escénico, con todos los movimientos, el vestuario, la puesta en escena, las luces, para que sea tal cual al show de Queen en los años 80.
Creo que una de las coas que más aprecia el público es la naturalidad con que se vive, porque no es algo que sale forzado.
¿Es más que un concierto musical? ¿Es como ver una puesta teatral?
Tiene como esas dos facetas. Se puede interpretar como algo más teatral porque en definitiva estamos representando a Queen, estamos copiando una escena y una música y todos los factores que hacen que sea igual a Queen; pero al mismo tiempo tiene la vivencia de un concierto de rock natural.
Nosotros somos músicos y no actores, imitamos a los miembros de Queen, pero lo hacemos desde el punto donde sentimos la música que estamos tocando. Entonces, está ese híbrido de teatro, pero al mismo tiempo la naturalidad musical y esa energía que se transmite totalmente al público.

¿Por qué ser fan de Queen y no de otra banda famosa?
Son muchísimos factores que nos han puesto en el lugar que estamos ahora, y tampoco existe una explicación muy clara del porqué nos gusta Queen. Creo que desde adolescentes a cada uno de nosotros nos empezó a gustar la música y terminamos escuchando a Queen y cada uno se metió a un nivel de profundidad. Lo que sí nunca se nos había pasado por la cabeza era hacer un tributo de la manera en que lo hacemos.
Recuerdo que cuando empezamos a tocar dijimos: «Che, nos gusta Queen» y la idea era divertirnos y tocar esa música porque simplemente nos gustaba, pero lo que pasó es que encontramos una química musical tan buena que no esperábamos que eso empezara a sonar muy bien y después sumado a que Pablo (el cantante) tiene una voz muy parecida a la de Freddie y un día se deja el bigote, se corta el pelo y busca el look de Freddie, hasta entonces todos dijimos: «Acá pasa algo, acá hay otra cosa». Desde ese momento se abrió otra puerta y fue la parte visual del show.

¿El escenario también nos transportará al mundo de Queen?
Todo lo que tenga que ver con la puesta en escena en el escenario, los mismos instrumentos que usamos, los mismos vestuarios, el piano de Freddie, es decir, todos los detalles son lo más parecido posible.
Respecto a los temas, fueron retomados de algunos de los en vivos de Queen y otros de versiones de estudio, pero armado de una manera en el que la mayoría de los temas son muy conocidos. Nuestro setlist pasa por toda la historia del grupo, desde los primeros discos, las primeras presentaciones y lo último, luego de la muerte de Freddie. Realmente es como estar en un concierto de Queen de los años 80.

¿Se puede comparar a Queen con los Beatles?
Todas las bandas clásicas que hoy perduran y que han tenido éxitos musicales han hecho algo propio y por gran medida han sido influenciados por otros, así como lo han hecho los mismo Beatles. Si tengo que destacar especialmente a Queen, para mí, es la voz de Freddie, que no hay otra como la de él, la calidad de los sonidos de Brian May y de la banda, ellos inventaban cosas que eran únicas en la musicalidad.
¿Hay presión por ser el mejor tributo de Queen?
Llevamos 25 años de carrera. Si hay algo que hacemos es mantener el respeto y es algo que nos mantiene en nuestras casillas. Aunque ha habido shows muy particulares, en donde sí nos hemos puesto nerviosos, por ejemplo, ir a tocar a Liverpool frente a más de 30,000 ingleses, por ejemplo, también cuando fuimos a Japón o a España, en donde asistieron más de 100 mil personas.
¿Qué pueden esperar del público salvadoreño?
Esperamos que las personas vayan con la predisposición de viajar en el tiempo para ver cómo era un show de Queen en los años 80 y conectarse con el show. Tarde o temprano toda la gente se conecta y eso esperamos que pase con la gente de El Salvador.