Las personas que han superado la COVID-19 y que ya recibieron la primera dosis de la va-cuna contra esa enfermedad pueden donar plasma hiperinmune. Este fluido contiene mayor carga de anticuerpos que el plasma de convaleciente que se ha recolectado anteriormente para dar soporte a las personas en estado grave.
La recolección de este tipo de plasma ha iniciado en el banco de plasma del Hospital Nacional de Niños Benjamín Bloom. De acuerdo con Jaime Alfaro, coordinador del programa de recolección, se han tenido resultados favorables.
«Se conoce como plasma hiperinmune porque el paciente ya no tiene la condición de convaleciente, sino que se expone por segunda vez al virus por medio de la vacuna, y estos plasmas contienen anticuerpos beneficiosos porque la concentración de anticuerpos es más alta», indicó Alfaro.
Detalló que toda persona que padeció la enfermedad y recibió la vacuna puede acercarse al hospital Bloom dos semanas después para donar este tipo de plasma, el cual ya está siendo aplicado a pacientes hospitalizados cuya condición de salud lo requiere.
Aquellos que ya recibieron las dos dosis de la vacuna también pueden acudir al centro médico para convertirse en donantes. «Nosotros ya hicimos las pruebas aquí, en el hospital Bloom, con los que se recuperaron y fueron donantes convalecientes, de quienes tenemos resultados previos, y que ya fueron vacunados. Les hemos hecho estudios y los anticuerpos se han duplicado, y en algunos cuadros clínicos de donantes se han triplicado. Ya obtuvimos plasma hiperinmune, se distribuyó y está dando buenos resultados», apuntó.
¿A QUÉ SE DEBE ESTO?
Alfaro explicó que existe la inmunidad de memoria, la cual se crea durante la primera exposición que la persona tuvo al virus, y esta es reforzada al recibir la vacuna contra la COVID-19, lo que genera una mayor cantidad de anticuerpos, de allí es donde surge el plasma hiperinmune.
«Hay una memoria inmunológica. Cuando el paciente se vuelve a enfrentar al virus por medio de la vacuna, se vuelven a generar anticuerpos en mayor proporción. La respuesta inmune primaria es cuando el paciente tiene exposición al virus por enfermedad o vacuna, y la respuesta es menor; pero la respuesta secundaria [después de la vacuna], cuando ya hay una exposición previa, el cuerpo ya conoce el virus, los linfocitos B de memoria se activan y la concentración de anticuerpos es más alta en un período de tiempo más corto», detalló.
Víctor Campos, quien padeció COVID-19 meses atrás y el pasado 16 de marzo recibió la primera dosis de la vacuna de AstraZeneca, donó plasma hiperinmune recientemente y dijo estar satisfecho de poder contribuir a mejorar la salud de otras personas mediante esa acción.
«Había muchas personas necesitando plasma, y con gusto me acerqué a la donación, y viendo la necesidad de una compañera de trabajo que el papá necesitaba plasma, vine a donar. El llamado que les hago a las personas que ya se recuperaron y han recibido la vacuna es a que vengan a donar. Cualquiera que tiene la posibilidad de donar que se acerque; todos necesitamos o podemos necesitar en algún futuro», aseguró Víctor.
Añadió que esta fue la séptima vez que dona plasma: anteriormente ya había donado el fluido de convaleciente, y esta vez fue hiperinmune. «El plasma viene a ser una esperanza para salir delante de esta situación, solo hay que convencer a las personas que ya tuvieron la enfermedad y fueron vacunadas de que se acerquen a donar», instó Alfaro.