El 77 % del territorio guatemalteco se encuentra en alerta roja por la COVID-19, según la actualización del sábado 7 de agosto del tablero epidemiológico del Ministerio de Salud. Esto ocurrió luego de un alza de 4,000 contagios cada día de la última semana, lo que corresponde a una tasa de positividad del 33 %.
Guatemala reporta 263 municipios, de 340 en total, con una alerta máxima por las infecciones. En solo 14 días, los municipios en rojo pasaron de 250 a 263, es decir, una diferencia de 13 municipios más. Además, 51 están en naranja y 26 en amarillo.
El panorama para los próximos 14 días no parece alentador para el país, ya que el viceministro de Hospitales, Francisco Coma, dijo ayer durante una entrevista radial del programa «A Primera Hora» del medio de comunicación Emisoras Unidas que existía la posibilidad que la variante estuviera en el país. Dicha inquietud fue confirmada momentos después por el presidente Alejandro Giammattei, quien informó a la prensa que son 14 los casos reportados para la mutación delta, detectada primero en la India.
Coma detalló que el aumento de casos de la semana pasada fue analizado en mesas técnicas y un comité de expertos e infectólogos. Todos coincidieron que por el comportamiento clínico y características de los pacientes «definitivamente la variante delta ya está en Guatemala. Esto representa mayor nivel de contagio, agravamiento de la enfermedad y modificación en el patrón… porque estamos viendo más pacientes fallecidos», señaló. «Los expedientes médicos de los pacientes que están ingresando en los hospitales nos hacen pensar que la variante está en Guatemala, solo estamos pendientes de la tipificación», agregó.
En julio, el Laboratorio Nacional de Salud envió al menos 50 muestras recopiladas entre mayo y junio, de la COVID-19 por sospechosa de la variante a un laboratorio de Panamá, pero esas pruebas habían dado negativo, aclaró Coma.
Hospitales sin personal y sin cama
El viceministro dijo que la red hospitalaria pública excede el 95 % de ocupación. «Los habitantes pueden llegar al hospital y es probable que no haya una cama de terapia intensiva», sostuvo.
«El fin de semana llegamos a tener el 100 % de ocupación en los hospitales temporales de camas graves, [la situación] nos ha obligado a realizar instalaciones móviles», aseguró. Pese a las convocatorias de personal para atender a más pacientes, los profesionales no atienden el llamado, reconoció.
Durante la entrevista, Coma también fue cuestionado sobre la situación de más de 50 pacientes en espera en el hospital temporal Parque de la Industria y Villa Nueva, a lo que respondió: «Es el momento más crítico, nunca habíamos llegado a este punto, estamos atendiendo a pacientes moderados en sillas con cilindros de oxígeno y cánula de alto flujo».