Los resultados de la matriz son lógicos y congruentes con nuestra realidad. No tenemos tierra, no tenemos petróleo o gas, ni recursos naturales de otro tipo, pero tenemos algo más importante: a nuestra gente trabajadora, honesta y emprendedora. Lo que tenemos que hacer en primer momento es vender nuestras ventajas competitivas y el entusiasmo de nuestra joven población, así como nuestra ubicación geográfica; por tanto, lo primero es un agresivo plan para atraer inversión foránea, además de nuestro mayor triunfo: nuestra seguridad y paz recién lograda, la cual estamos dispuestos a defender.
Convirtamos en entes productivos a esos miles de salvadoreños del sector informal. Tenemos otras ventajas: el uso de dos monedas de curso legal; incentivemos a nuestros compatriotas en el exterior a que inviertan en su tierra.
El primer paso que nos arroja la matriz es ese, los demás no los podemos descuidar, pero en el mediano plazo, con 399 puntos, tenemos en primer lugar el fomento de la inversión extranjera.
Como puesto número dos en la implementación de los factores críticos, tenemos, con 378 puntos, el desarrollo de infraestructuras por zonas, que ya se comenzó con mucho éxito, otra conclusión lógica si queremos incentivar a los inversionistas extranjeros a invertir acá, en nuestro país.
Esta es, por tanto, una condición básica y primordial. Mejores carreteras, energías, agua, internet, mejores puertos y aeropuertos, mejor transporte y planificación vial y urbana, así como minimizar la vulnerabilidad de nuestro territorio ante los fenómenos naturales.
En relación con las dos anteriores, tenemos en tercer lugar un plan integral de turismo, apoyando principalmente a nuestra imbatible micro y pequeña empresa. Ven como este método científico va concatenando como una red los factores críticos en orden de importancia, casi cae por su peso.
Luego de estas acciones, el turismo, casi por lógica, incrementa. Todos los procesos de desarrollo en diferentes latitudes han tenido este comportamiento en el último siglo.
¿Les suenan Singapur, Japón, Corea del Sur, el norte de Europa, la República Popular China y otros? ¿Quién no quiere conocer estos países? ¿Quién no quiere ir y explorar de primera mano esos milagros económicos? Esos por mencionar algunos.
En cuarto lugar, nos dice este método, tenemos que desarrollar la periferia, lo tenemos que hacer; transformemos una aparente desventaja en una fortaleza, lleguemos hasta el último caserío y hagamos que crezca, brindémosles a todos las mismas oportunidades y este factor multiplicador nos acercará cada vez más a encontrar nuestra vía para el desarrollo.
Por lo tanto, el plan agroindustrial y de desarrollo rural contribuirá para el logro de nuestra visión. Sin descuidar todo lo anterior, tenemos que potenciar el Plan Control Territorial, que a la larga es el dínamo de nuestro plan, el corazón, el motor que nos impulsa a todo lo anterior.
Es necesario que en este esfuerzo todos participemos, que nos involucremos totalmente, es un esfuerzo de todos; por lo tanto, es necesaria una democracia participativa y lograr el pleno empleo.
Por tanto, democracia participativa y empleo ocupan la prioridad y puesto número seis. Salud y educación: En la realidad ya se avanzó bastante en estos rubros que son sumamente básicos para encontrar un camino autóctono hacia el desarrollo.
Hay quepotencializar a nuestros jóvenes en áreas técnicas, en la masificación del aprendizaje del idioma inglés y en el uso de tecnologías, computación y todas las plataformas.
Vamos por buen camino y, por supuesto, como pegamento de todo el engranaje, un presupuesto equilibrado, haciendo énfasis en tener finanzas sanas, como ya se está haciendo, mejorando la recaudación fiscal, evitando la elusión y evasión y, además, siendo muy creativos.
Todo esto con una buena política de relaciones exteriores, abriendo nuevos horizontes y creando nuevas alianzas.
Vamos por buen camino. Sigamos con todo, de la mano de un liderazgo comprometido con su pueblo.