El Juzgado Décimo de Paz de San Salvador envió hoy a prisión preventiva a Roberto Silva Rugamas quien es procesado por los delitos de difusión ilegal de información, acoso a través de las tecnologías de la información y expresiones de violencia en perjuicio de Karina Sosa y Daniela Genovez, ambas del partido FMLN.
La audiencia se realizó esta tarde de viernes en la sala 5-C del Centro Judicial de San Salvador donde compareció el youtuber y al que también asistieron dos de las víctimas.
Esposado y sin brindar declaraciones a los medios de comunicación Silva Rugamas acudió a la audiencia inicial acompañado de su abogada y escoltado por agentes policiales.
Ya en la sala de audiencia, a los periodistas se les permitió ingresar brevemente en grupos de cinco, para hacer imágenes y luego tenían que abandonar las instalaciones para el desarrollo de la audiencia.
Silva Rugamas no quiso hacer declaraciones. No fue el caso de las víctimas Sosa y Genovez quienes antes de ingresar a la sala donde estaba el acusado expresaron que lo único que esperan de este caso es que se haga justicia.
«Esperamos que se respeten a las mujeres de este país y para que no exista violencia y también aprovechamos para decirles a las mujeres que son víctimas de cualquier agresión a que rompan el silencio y denuncien y que no tengan miedo», dijo Sosa.
Mientras que Genovés ha visto con buenos ojos que otras víctimas hayan acudido a las autoridades a interponer denuncias.
«Espero que se haga justicia en este caso y me alegro que otras mujeres a partir de la denuncia que interpusimos se hayan tomado la valentía de poder denunciar este tipo de agresiones que no deben de ser permitidas en El Salvador», expresó Genovez.
Roberto Silva fue arrestado la noche del lunes 8 de marzo luego que fiscales y policías lo interceptaron en un hotel de la colonia Miramonte. Algunas de las situaciones de acoso se dieron en el hotel donde el Tribunal Supremo Electoral (TSE) realizaba el escrutinio final de las elecciones. Antes, en redes sociales, fueron publicados videos en los que el imputado hace referencia a las víctimas con palabras soeces y vulgaridades.
La Fiscalía informó el jueves 11 de marzo que hay más denuncias de acoso en contra del sujeto, pero no se podían brindar detalles por protección de las ciudadanas.
La condena por difusión ilegal de información es de uno a tres años de prisión; por acoso a través de la tecnología de información de cuatro a seis años; mientras que el de expresiones de violencia contra las mujeres no es condenable a prisión sino multado hasta con 25 salarios.